David Díaz es socio director de Autecnia y especialista en robotización de grúas industriales. En esta entrevista asegura que AUTECNIA puede convertir una grúa industrial en un activo 4.0 y lograr que actúe como un robot colaborativo.

–¿Cuál es el secreto del éxito de la compañía?

–Aún no podemos hablar de éxito, apenas hemos arrancado y nos queda mucho por delante. Conjugamos dos cosas positivas, un modelo de negocio muy en la realidad de lo que ahora demanda la industria, y una dilatada experiencia que nos viene de mucho antes de que Autecnia existiera, y que nos permite entender y comunicarnos muy bien con nuestros clientes. Nuestro equipo técnico y los socios que hemos creado este proyecto realizamos automatizaciones y aplicamos tecnología mucho antes de que aparecieran los conceptos de digitalización e industria 4.0. Llevamos 20 años en el sector de automatización industrial, es una ventaja competitiva cuando entramos en los detalles de definición de un proceso de transformación digital.

–Son especialistas en robotización de grandes máquinas y grúas portuarias e industriales, ¿En que consiste exactamente ese campo tecnológico?

–Es un campo tecnológico que conocemos muy bien. En el mundo hay muy pocas empresas que se dediquen a robotizar y automatizar grúas industriales. Aplicamos alta tecnología con el objetivo de elevar el grado de automatización de unas máquinas de producción tan importantes, y a veces tan poco valoradas, como las grúas industriales. Robotizarlas y automatizarlas influye directamente en la mejora de la logística interna de las empresas, reduciendo tiempos y costes en una parte del proceso interno que hoy si puede ser optimizado. Además permite la obtención de valiosísimos datos que se generan en la mitad de los procesos. Esto influye decisivamente en la cuenta de resultados. Se da la paradoja de que estamos en un proceso de transformación digital, pero un porcentaje muy alto de las industrias no tienen en cuenta los importantes ahorros que pueden aplicarse a los procesos de logística interna de sus grúas. Eso es lo que aportamos en Autecnia.

–¿Hacia donde se encamina el futuro de este sector tecnológico de las grúas industriales?

–La tendencia de futuro es conjugar tecnologías maduras ya existentes con los nuevos habilitadores tecnológicos como analítica de datos e inteligencia artificial, con el objetivo de que la grúa industrial sea un verdadero activo 4.0. En toda la industria “pesada” se emplean grúas para la logística interna, por ejemplo en el sector naval, siderurgia, metal, construcción y puertos. Un ahorro de pocos segundos en los ciclos de funcionamiento de estas máquinas, o tener una gestión centralizada que permita aplicar algoritmia de datos e inteligencia artificial, tiene unas posibilidades inmensas para todo el conjunto del proceso productivo mas allá de la propia grúa. Ya estamos implantando sistemas de posicionamiento totalmente automáticos que permiten que una grúa sea un “robot colaborativo” con los operadores y jefes de producción. Ese es el futuro de este sector y donde estamos situados en Autecnia, crear grúas que sean activos 4.0 y que actúen como robots colaborativos.

–¿Qué papel juega el equipo humano en la empresa?

Es el fundamento de todo lo que es AUTECNIA. No hay otro valor mas que nuestro equipo técnico y todo el valor que tenemos nos nace de nuestra gente. En este sentido estamos muy orgullosos de aunar en el equipo, ingenieros con larga trayectoria junto a chicos recién salidos del Master de Automatización de la Universidad de Oviedo. Esa mezcla de juventud y veteranía es maravillosa en todos los aspectos. Es muy satisfactorio y un orgullo ver como hay ingenieros que se han unido a AUTECNIA desde el primer minuto solo por creer en este proyecto, esto es algo que no se puede expresar con palabras y que nunca olvidaremos.

–Son un ejemplo de que desde Asturias se puede innovar. ¿Qué consejos daría a los emprendedores?

–En la industria, que es lo que conocemos, nuestro consejo es no caer en la obligación imperiosa de tener que ser siempre disruptivo e innovador en todo lo que haces y ofreces. La tecnología es útil y muy valiosa aunque no sea disruptiva. No pasa nada por implantar e integrar tecnología de terceros ya conocida y probada. Precisamente en la industria la tecnología es también valiosa por ser segura, fiable, probada y madura, y eso debe conjugarse con la innovación y los nuevos desarrollos. Ese equilibrio entre lo innovador y las tecnologías maduras es importante para un negocio que se quiere mover en la tecnología industrial, y salir al mercado internacional. Pueden asegurarse proyectos e ingresos en base a integración de tecnologías existentes.