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“Recibo una unidad altamente preparada”, dice el nuevo jefe del Regimiento “Príncipe”

El coronel Gutiérrez Alcalá se propone “fortalecer la moral, la preparación física, la operatividad y la disponibilidad para las misiones de más riesgo”

El coronel Pedro Luis Gutiérrez Alcalá, a la izquierda, y el general jefe de la BRILAT, Luis Cortés Delgado, durante la parada militar. | Irma Collín

“Nuestro principal valor es el factor humano, tenemos que cuidar mucho a nuestro personal, la moral de nuestra gente y sus familias, que forman parte de nuestra familia”, aseguró este viernes el coronel Pedro Luis Gutiérrez Alcalá, durante su toma de posesión como jefe del Regimiento “Príncipe” número 3, que mandará en los próximos dos años. Curtido en diferentes destinos, como Ceuta, donde fue oficial de Inteligencia durante tres años, o Irak, donde mandó fuerzas especiales que actuaban con tropas de élite locales en lucha contra el Estado Islámico, Gutiérrez Alcalá marcó tres objetivos, en su primera alocución en Asturias: “La fortaleza moral, la preparación física y la operatividad y disponibilidad para las misiones más demandantes y las situaciones de mayor riesgo y fatiga”, tratando de “ser un leal soldado al servicio de España”.

Al acto acudió un nutrido grupo de “boinas verdes” que sirvieron bajo su mando en Alicante en Operaciones Especiales. “Diría que es un jefe ejemplar, siempre preocupado por todos los hombres a su mando, sean del escalafón que sean”, indicó uno de ellos. “Lo definiría como un auténtico líder”, aseveró otro de los militares que sirvió bajo su mando en Irak, donde estuvo destinado con el Grupo de Operaciones Especiales (GOE) “Valencia” III, en 2015 y 2017.

La toma de posesión estuvo presidida por el general Luis Cortés Delgado, jefe de la BRILAT. El coronel indicó que impulsará la “integración” en esta unidad, porque “juntos siempre llegaremos más lejos”. El momento más emotivo se produjo cuando el coronel Pardo de Santayana, jefe saliente del “Príncipe”, entregó el guión del regimiento a su sucesor, simbolizando así el relevo en el mando, subrayado previamente por el general Cortés al conminar a los soldados y oficiales de la unidad a obedecer las órdenes de Gutiérrez.

El coronel Alfonso Pardo de Santayana entrega el guion del Regimiento “Príncipe” al coronel Gutiérrez Alcalá. Irma Collín

En su discurso, además de dar las gracias a sus progenitores (su padre falleció recientemente) y a su mujer y sus dos hijos por su apoyo incondicional, también reconoció a sus mandos y compañeros y tuvo un recuerdo para dos de sus compañeros de promoción, el teniente, nombrado capitán a título póstumo, Carlos Recalde, fallecido en 1995 en unas prácticas de montaña en la ascensión al Pico Posets (Huesca), y al también capitán a título póstumo Antonio Montalbán, fallecido en la base de Cerro Muriano (Córdoba) en 1996, al explotar un artefacto explosivo durante unas prácticas de desactivación.

Gutiérrez agradeció también a los representantes de la sociedad asturiana. “El Regimiento ‘Príncipe’ es parte consustancial de Asturias, por lo que les ofrezco mi apoyo y disposición permanente y me comprometo a mantener y estrechar los vínculos que se iniciaron hace más de 100 años”, dijo. Cómo no, agradeció a su predecesor, el coronel Pardo de Santayana, el trabajo realizado en los últimos dos años. “Recibo una unidad altamente preparada y con un elevado nivel de adiestramiento, y quiero destacar tu impulso para mejorar de manera significativa las instalaciones de instrucción y adiestramiento y las capacidades del campo de maniobras”, señaló.

El coronel Gutiérrez Alcalá, en su primera alocución a los soldados del “Príncipe”. | Irma Collín

“Soldados, no me cabe duda de que os lo merecéis todo, pero no esperéis nada a cambio y obtendréis la mejor recompensa, que no es otra que la íntima satisfacción del deber cumplido”, arengó. Tras pedir “espíritu de sacrificio y visión crítica para reconocer y corregir los errores”, el coronel Gutiérrez pidió “a Dios que nos acompañe y ampare”, pero aún más: “Me encomiendo a nuestra madre la Virgen de Covadonga, para que nos proteja”.

Sobre sus misiones en Irak, Gutiérrez Alcalá indicó que habían sido “complejas, con múltiples factores en juego, en primer lugar, la soberanía del país en el que estábamos. Tuvieron sus dificultades, pero para eso nos preparamos en el día a día, para alcanzar la máxima operatividad y disponibilidad, para cuando se nos requiera, no solo fuera, sino también aquí, en territorio nacional, como ha sido el caso recientemente de las operaciones Balmis y Baluarte en las que estamos participando”. En cuanto a las misiones que desarrollan tropas del “Príncipe” en el exterior, en Irak y Mali, Gutiérrez aseguró que la unidad con base en La Belga (Siero) “está perfectamente preparada” para enfrentarlas.

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