Tercer grado para la cómplice del asesinato de Isabel Carrasco en León

Raquel Gago, que ha cumplido cinco de los catorce años a los que fue condenada, solo tendrá que dormir en el centro de inserción

Raquel Gago, durante el juicio

Raquel Gago, durante el juicio / EFE

Luis Ángel Vega

Luis Ángel Vega

Oviedo

Ha cumplido cinco de los catorce años a los que fue condenada como cómplice del asesinato de la presidenta de la Diputación de León, Isabel Carrasco, perpetrado por Montserrat González y su hija Triana Martínez –ambas actualmente en la cárcel de Asturias– el 12 de mayo de 2014 en la capital leonesa. La exagente de la Policía Local de León Raquel Gago acaba de obtener el tercer grado y pasará a un centro de inserción en Madrid en el que solo tendrá que dormir. Durante su estancia en prisión ha disfrutado hasta de seis permisos. La mujer que escondió el arma del crimen después de que se la entregase Triana Martínez estuvo primero en la cárcel de Villahierro (León) y luego en Alcalá de Henares (Madrid), acumulando muy buenos informes, hasta el punto de que ha sido calificada como una “interna excelente”. Ahora ingresará en el centro de inserción “Victoria Kent”, el barrio madrileño de Delicias, la antigua cárcel de Yeserías.

Mientras Gago disfruta de una libertad vigilada, Montserrat González y Triana Martínez siguen cumpliendo prisión en Asturias, sin disfrutar de beneficios, después de que perdiesen su puesto en el economato al encontrárseles un rizador de pelo y un móvil. La madre pasó entonces a trabajar en el invernadero y la hija en la biblioteca.

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