El Padre Ángel ha hecho una llamada al diálogo para poner fin a la guerra de Ucrania en el desayuno del Fórum Europa organizado por Nueva Economía Fórum esta mañana en Madrid, en el que ha sido presentado por el presidente del Principado, Adrián Barbón. El fundador y presidente de Mensajeros de la Paz, que hace poco cumplía 85 años, ha estado arropado por diversas personalidades, en buena parte asturianas, de distintos ámbitos como la vicesecretaría general del PSOE, Adriana Lastra; el presidente de Unicef España, Gustavo Suárez Pertierra; la alcaldesa de Gijón, Ana González; el secretario general de UGT, José Alvarez o el cardenal y arzobispo de Madrid, Carlos Osoro. También estaba presente el embajador de Ucrania en España.
"La Guerra en Ucrania, sin duda alguna, es una guerra que yo creía que en el siglo XXI no habría. Al terminar la guerra de Irak yo decía que nunca más habría una guerra; por lo menos apoyada por tantos gobiernos y presidentes. Es verdad que no ha habido una guerra tan apoyada como aquella y que esta guerra solamente la hizo uno y además, es verdad, que todos en Europa y el mismo presidente de Estados Unidos están haciendo lo posible y lo imposible porque eso se termine", ha comentado el Padre Ángel en el desayuno informativo que ha tenido como escenario el hotel Mandarín Oriental Ritz, en Madrid. El fundador de la Cruz de los Ángeles y de Mensajeros de la Paz ha hecho suyo el deseo del Papa Francisco de que "debemos dialogar para que haya paz". El cura asturiano ha afirmado que tiene "esperanza" de que pueda dar frutos el diálogo para poner a fin al conflicto bélico que sacude Europa desde el pasado mes, y de cuyas consecuencias ha sido testigo semanas atrás, cuando se desplazó a la frontera de Ucrania con Polonia.
El encargado de glosar la figura del Padre Ángel ha sido el presidente del Principado, Adrián Barbón, que le definió como "una embajada de solidaridad y humanidad en sí mismo". Destacó su inquietud por la obra social en el seno de la Iglesia cuando apenas llevaba poco más de un año de sacerdocio con la fundación de "La Cruz de los .Ángeles" "junto a Ángel Silva" y de Mensajeros de la Paz, en 1962. "El Padre Ángel es una buena persona que ha resuelto dedicar su vida a ayudar a los demás", ha manifestado Barbón, quien ha aprovechado su presencia en Madrid para decirle al cura nacido en La Rebollada (Mieres) que puede estar "orgulloso de la reacción de la sociedad asturiana" con su acogida a los refugiados llegados de Ucrania. Llegado a este punto, el presidente del Principado ha reconocido que "la reacción de apoyo a las personas que han tenido que abandonar su hogar para salvar la vida ha sido fortísima en Asturias, tanto que hay que reconocer que ha desbordado los cauces institucionales. Esta oleada improvisada de iniciativas también provoca inconvenientes, pero como jefe de Gobierno de Asturias solo puedo decir una cosa: me siento profundamente orgullos de la reacción asturiana". Barbón ha apuntado que esta respuesta social "es una lección para todos los que ejercemos responsabilidades institucionales" y ha admitido que "los países europeos tenemos que ser más ágiles, coordinarnos mejor, sin enramarnos en trámites burocráticos para ofrecer la respuesta humanitaria que Ucrania necesita. La sociedad nos enseña el camino".
El presidente del Principado ha dado por primera vez la estimación de esa respuesta de Asturias. "Hay ya más de 400 personas procedentes de Ucrania, 110 a través de la cooperación directa con el Gobierno de España". Barbón, no obstante, indicó que "los números van variando día a día, pero ayer había cerca de un centenar de menores escolarizados y unas 330 personas ya habían solicitado asistencia sanitaria". Barbón ha concluido su intervención con un compromiso, "siempre me tendrás en tu equipo", al que luego se sumaría Adriana Lastra, y con un deseo; "Que la Santina te acompañe siempre".
El Padre Ángel confesó al inicio del acto que sobre todo "vengo a escuchar, porque a mi edad cuesta mucho hablar" y destacó que "somos una sociedad solidaria, casi hay más casas de acogida que refugiados que hayan llegado a España". Al ser preguntado por el papel de la Iglesia en esta crisis humanitaria, no se anduvo con rodeos: "La Iglesia de verdad ha hecho cosas por las que avergonzarnos, pedir perdón y reparar, pero sigo queriendo y amando a esta Iglesia porque ha sido pionera en las obras sociales, ha sido pionera en trabajar con los leprosos, los enfermos de SIDA y ahora con los refugiados que vienen. Hay que seguir luchando y, sobre todo, queriendo y amando a la Iglesia". Luego calificó al Papa Francisco "como una bendición de Dios" y al ser preguntado por proyectos de futuro afirmó que "en menos de dos meses tendremos todas las licencias para la catedral de la fe, en Mejorada del Campo, que con una fe inmensa construyó Justo Gallego. Queremos que sea un lugar de encuentro de todos. Estoy feliz". Al ser cuestionado sobre quien le sucederá en Mensajeros de la Paz, dejó entrever que hay cantera de sobra: "Hay muchas personas preparadas para seguir. Aquí no pensamos sucesiones, solo en trabajar y cada uno en su sitio".
