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Encarna Abascal: “El suicidio tiene una perspectiva laboral que está pendiente de abordar”

La secretaria nacional de CSIF de Prevención reclama un protocolo que atienda a los policías locales, como ya hay en la Guardia Civil

Encarna Abascal. | J. A. A.

Cada día del pasado año se suicidaron en España 14 personas, una media de cuatro más que en 2020. La mayoría de personas que se quitaron la vida estaban en edad activa. El impacto de estas cifras ha movido a la reflexión al sindicato CSIF, que organiza hoy en el Centro Polivalente de Lugones una jornada dedicada a la Prevención del suicidio en las cuerpos y fuerzas de seguridad, en horario de nueve de la mañana a dos de la tarde. Una de las participantes será Encarna Abascal Pérez, secretaria nacional de Prevención de Riesgos Laborales de CSIF.

“El suicidio es la primera causa de muerte no natural en los cuerpos y fuerzas de seguridad. En diez años se han quitado la vida 300 policías locales en toda España, una cifra que supera en un 2,5 por ciento la media de la población general”, destaca Encarna Abascal, quien tiene claro que “el suicidio tiene una perspectiva laboral que está pendiente de abordar. Hay que acabar con tabús. Y los trabajadores de los cuerpos y fuerzas de seguridad presentan un riesgo potencial mayor porque viven a diario situaciones límite”. El escenario de los suicidios se ha agravado tras la pandemia, también entre los agentes de los cuerpos y fuerzas de seguridad: “Su labor no acaba cuando se quitan el uniforme. Es muy difícil empezar el día entrando en una casa donde te encuentras, por ejemplo, a personas mayores y solas muertas hace tiempo; con casos de violencia de género; o accidentes de tráfico con muertos. Ese tipo de situaciones genera impactos muy grandes a nivel mental”, afirma la secretaria nacional de Prevención de Riesgos Laborales de CSIF.

Encarna Abascal sostiene que las tasas de suicidio se podrían bajar con una apuesta decidida de la Administración por medidas preventivas, tales como la atención psicológica a los agentes que pasan por episodios límite, protocolos para los policías locales similares a los y existentes en la Guardia Civil o el Cuerpo Nacional de Policía o la puesta en marcha de un teléfono corto a disposición de toda la población al que puedan llamarse personas con tentaciones suicidas. “Ya está aprobado el 024 y nos han dicho que podría entrar en funcionamiento en este mes de mayo, pero aún no hay una fecha confirmada”, comenta Encarna Abascal. La creación de un registro nacional donde se recoja el colectivo laboral al que pertenecen las personas que acaban quitándose la vida es otra de las herramientas que ayudaría al estudio de estas conductas. CSIF también considera necesarios más recursos enfocados a reforzar las medidas de detección de precoz.

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