Ramón Álvarez ha presentado su dimisión como presidente de la Asociación de Campings de Asturias, un cargo en el que llevaba más de veinte años. Poco después de presentar la renuncia, Ramón Álvarez explicaba a LA NUEVA ESPAÑA que era una decisión estrictamente personal: “Era ya un periodo muy largo y estoy cansado. Llevaba tiempo pensando en dejarlo. Hay que saber dar el paso”, señaló.
Álvarez resaltó que la asociación queda en buenas manos: “Hay cuatro vicepresidencias y un gerente, José Luis del Río, que lo pueden llevar muy bien”. Destacó que siente “orgullo” al haber representado al sector durante veinte años, pero cree que es hora de que la asociación sea dirigida “por gente nueva, con ganas”. Apuntó que su marcha culminará con un proceso electoral que se desarrollará “con tranquilidad”, y que hasta entonces quizá haya una dirección colegiada, aunque en este momento es la vicepresidenta primera, Laura Arias, la que ocupa la presidencia en funciones.
El presidente saliente asegura que se va “con la conciencia tranquila” y dejando “grandes amigos en el sector”. Su deseo es que quienes le sucedan “lo hagan mejor, si es posible”. A sus 66 años y ya jubilado, cree que le ha llegado la hora de “disfrutar” y “quitarse problemas”. Se marcha satisfecho de haber podido cerrar la celebración del Congreso Nacional de Campings de España en Asturias el próximo mes de noviembre. Y con una única asignatura pendiente: sigue si terminar el Reglamento de Turismo, que lleva “mucho tiempo” negociando con el Gobierno del Principado y que espera “que llegue a buen puerto”.
“Es el momento de que el colectivo lo dirija gente nueva y con ganas, había que dar el paso”
La dimisión del oniense llevó a Hostelería y Turismo de Asturias (Otea) y a la Asociación de Campings a emitir sendos comunicados de reconocimiento y agradecimiento. “Desde Otea queremos dejar patente nuestro agradecimiento a Ramón Álvarez por su trabajo durante los últimos 20 años en favor del Turismo de Asturias. Su esfuerzo y su dedicación personal durante este largo tiempo ha sido incalculable y desde Otea se lo reconocemos y valoramos los frutos que ese esfuerzo ha producido: un subsector del camping reconocido, moderno, con empresas consolidadas y potentes que es ejemplo de asociacionismo a nivel nacional”, señaló Otea, que considera “especialmente relevante” su visión de las necesidades de las empresas turísticas de Asturias, “buscando siempre su cohesión y su unidad, y respaldando todas las iniciativas orientadas a la fusión del tejido asociativo turístico de Asturias para conformar entidades con fuerte representatividad y potencia”. Esa claridad de ideas le llevó a plantear la incorporación de la Asociación de Campings de Asturias, como entidad independiente, en Otea, que fue aprobada en el año 2019 por unanimidad por la asamblea de la asociación. Según Otea, el turismo asturiano goza de estabilidad empresarial y asociativa gracias a personas como Ramón Álvarez, “que han sacrificado su vida personal por el bien general de Asturias”.
La Asociación de Campings señaló que la representación asociativa pasa a los vicepresidentes, que continuarán con la labor de la actual junta directiva, en un proceso de “transición natural hasta el siguiente periodo electoral”. El colectivo asegura que el proceso iniciado ayer estaba previsto. “Hace meses que Ramón Alvarez y la directiva de Campings de Asturias acordaron este cambio y, desde ese momento, las cuatro vicepresidencias que ocupan Laura Arias, Yolanda Alzu, Ignacio Pantiga y Rocío Ortea, fueron asumiendo mayor protagonismo en la vida diaria de la entidad”. La asociación asegura que Ramón Álvarez ha conseguido “un subsector consolidado, profesional y de la máxima representación”.
