El neurólogo José Antonio Vidal se ha convertido en el nuevo secretario general del Sindicato Médico de Asturias (SIMPA) tras imponerse por 494 votos frente a 426 a la urgencióloga Rocío Fernández. El recuento ha concluido sobre las 3.15 horas de esta madrugada del miércoles, tras una laboriosa gestión de los aproximadamente 550 votos emitidos por correo.

La participación fue alta, más elevada de lo esperado por la mayoría de los integrantes del sindicato: algo superior al 50 por ciento, en un cuerpo electoral de 1.821 afiliados.

"Es una victoria algo ajustada, pero suficientemente clara, sin incidencias ni reclamaciones", ha señalado el ganador al término del largo escrutinio, que comenzó poco después de las 22.00 horas de ayer jueves.

La nueva directiva del SIMPA queda configurada del siguiente modo: José Antonio Vidal Sánchez (Gijón, 1966), secretario general (cargo que conlleva el poder ejecutivo de la organización y en el que sustituye a Antonio Matador); Sonia Goyanes, presidenta; Begoña Paredes, vicepresidenta (el que ya era su cargo anterior); y Armando Paredes, tesorero.

Rocío Fernández

Los 546 votos emitidos inicialmente por correo (al final fueron algunos más) hacían presagiar una elevada participación en las primeras elecciones que vive el SIMPA en sus cuatro décadas de historia. Además, se registraron 363 sufragios presenciales.

Hasta la fecha, todas las renovaciones en el cuadro dirigente de la organización, que tienen lugar cada cuatro años, se habían resuelto con una lista de consenso. En el Sindicato Médico de Asturias el poder ejecutivo recae en el secretario general. Dos eran los candidatos a este puesto: la médica de Urgencias Rocío Isabel Fernández Rodríguez (Cangas de Onís, 1979) y el neurólogo José Antonio Vidal Sánchez (Gijón, 1966). Este último tiene plaza de neurólogo en el Hospital Universitario San Agustín de Avilés.

En sendas entrevistas con LA NUEVA ESPAÑA, los candidatos fueron preguntados por sus tres objetivos fundamentales para los próximos cuatro años, en caso de salir elegidos. La respuesta del doctor Vidal fue la siguiente: “Hacer grande al SIMPA: mejorar las condiciones laborales, económicas y sociales de los facultativos, solo posible a través de la unión. Hacerlo participativo: tenemos que ser un sindicato abierto y transparente; hay que mejorar la relación con, desde y hacia los afiliados; la distancia entre los que dirigen y los afiliados genera desafección. Hacerlo fuerte: trabajo duro, conocimiento y negociación constante, que generen respeto y la valentía”.

Puedes leer las entrevistas completas aquí.