La Asociación de Enfermos de Fibromialgia y Fatiga Crónica del Principado de Asturias (AENFIPA) organizó recientemente, con motivo de su 25 aniversario, una sesión de preguntas y respuestas sobre incapacidades laborales a la que asistieron más de 50 personas afectadas e interesadas en esta cuestión. Sorprende la cifra de personas que un soleado sábado de mayo escogieron venir a esta sesión en la que ofrecimos respuestas a sus inquietudes en este ámbito. También sigue resultando sorprendente el gran nivel de desconocimiento que existe en nuestro entorno ante este tipo de soluciones de vida que nos ofrece nuestro estado de bienestar.

¿Cuándo la incapacidad laboral es un derecho? ¿Es lo mismo incapacidad y discapacidad? ¿Cómo debemos proceder a la hora de solicitar el nivel de incapacidad que consideramos nos corresponde?

Con estas preguntas abrimos una sesión que se extendió más de tres horas la tarde previa al festival de Eurovisión, en la que las directivas de AENFIPA y Velázquez y Villa nos volcamos para aclarar tantas y tantas inquietudes que surgían sin parar. Cuando alguien que quiere trabajar ve limitado su potencial por causas de salud, el abismo que se abre es muy heterogéneo aunque sus afectados comparten idéntica incertidumbre y desesperación.

La invisibilidad y complejidad diagnóstica de dolencias tan complejas como la fibromialgia o determinadas lesiones musculares o articulares, los requisitos que avalan la solicitud de incapacidad, el rol de los tribunales médicos… hasta qué punto una discapacidad puede o no determinar una incapacidad, el rol de atención primaria a la hora de elaborar los informes correspondientes, qué opciones tienen las compañías empleadoras ante estas circunstancias… la lista de cuestiones que generan incertidumbre es larga y la confusión se extiende a las familias y entorno laboral de las personas afectadas.

Créanme, es un problema social. Entidades empleadoras, Seguridad Social, pacientes y sociedad en general compartimos las consecuencias, en mayor o menor medida, de una realidad que afecta a millones de personas en nuestro país y que lastra nuestro estado de bienestar.

El 20 de junio el Despacho Velázquez y Villa responderá a las dudas que tengas. Nos las tienes que enviar al final de estas líneas

Sensibilizar e informar sobre esta cuestión es una responsabilidad que los que dedicamos nuestro expertise profesional a esta materia, no podemos ni debemos eludir. Por eso en Velázquez y Villa lanzamos una línea de actividad de Responsabilidad Social Empresarial hace dos años, en plena pandemia, y seguimos apostando por ella con acciones continuadas a lo largo del año.

Contamos con manuales, una mesa de trabajo de asuntos sanitarios, elaboramos un informe de incapacidad anual y ofrecemos sesiones informativas a lo largo del año dirigidas a todo tipo de colectivos que precisen atención en este terreno. Todo ello, por supuesto, sin costes económicos para sus participantes. Porque creemos profundamente en la importancia de tender la mano y colaborar con el entorno donde hemos logrado consolidarnos. Y porque apostamos por las alianzas y la colaboración en todos sus ámbitos. Juntos llegamos más lejos.

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