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Los ataques del lobo en Asturias en datos: 2.500 reses muertas y 800.000 euros en indemnizaciones

Las cifras, de 2021, son provisionales, pues hay expedientes que aún se están tramitando

El lobo D. G.

Los ataques del lobo en Asturias se miden en cifras. Contantes y sonantes. Según datos oficiales, el año pasado se registraron 2.472 bajas provocadas por el cánido en Asturias. Estas muertes han supuesto una factura de 783.000 euros para las arcas regionales; una cuantía que puede aumentar, pues desde la Consejería de Medio Rural advierten que son datos provisionales "porque hay expedientes que se están tramitando". Los datos del Principado están el la línea del resto de comunidades del Noroeste español, la zona más afectada por el lobo, cuyos gobiernos rechazan la protección del animal en toda España decidida por el Gobierno el pasado septiembre.

Más de 4.800 reses muertas en Castilla y León

El Gobierno de Castilla y León registró el año pasado 2.669 avisos por ataques de lobos a cabañas ganaderas, lo que provocó 4.287 bajas, según los datos provisionales aportados por la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de esa comunidad autónoma. La provincia más afectada fue un año más Ávila, donde se registraron 1.320 ataques y 1.457 cabezas de ganado afectadas. Segovia, con 555 ataques y 891 reses dañadas, y Zamora, con 309 ataques y 915 animales domésticos afectados se sitúan a continuación.

El lobo cuesta a Cantabria casi medio millón de euros al año

El Ejecutivo de Cantabria contabilizó el año pasado 1.391 reses muertas y 124 heridas por ataques de lobos, y se vio obligado a desembolsar 426.668,09 euros para indemnizar a los ganaderos afectados. El informe emitido por el Ejecutivo de Miguel Ángel Revilla revela que tanto el número de grupos familiares como el de ejemplares ha aumentado en los últimos años en Cantabria.

Lugo, la provincia gallega más afectada

Galicia ha tramitado hasta el momento los daños provocados por los lobos hasta el 30 de septiembre del año pasado. Fueron 1.204 ataques denunciados por ganaderos, que supusieron 2.050 animales dañados: 944 ovejas, 604 vacas, 311 caballos y 191 cabras. El número de reses atacadas por lobos se ha incrementado en un 43 por ciento en los últimos diez años, según los cálculos del Gobierno gallego. Lugo es la provincia más afectada, con 584 ataques y 922 bajas, seguida de Orense (253 avisos y 478 reses afectadas), La Coruña (252 ataques y 460 reses afectadas) y Pontevedra (85 avisos y 190 animales dañados).

Los cuatro gobiernos del Noroeste sostienen que la evolución del número de ataques y los daños al ganado demuestran que las poblaciones de lobos están en aumento, y que por lo tanto la situación de la especie no es desfavorable, al contrario de lo que recogió el último informe de la naturaleza de la Unión Europea, con el que el Ministerio avaló la protección de la especie en toda España. De ahí su rechazo a la protección del lobo también al norte del río Duero. El debate se está dilucidando en los tribunales de justicia.

Los ganaderos, por su lado, aseguran que buena parte de los ataques del lobo no se denuncian a las administraciones públicas, por la tardanza de los cobros y las dificultades en algunas ocasiones para conseguir informes positivos de las guarderías. Muchos de ellos cuentan con seguros privados, por lo que el número de bajas “real” podría ser sensiblemente mayor al “oficial”.

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