El presidente del Principado, Adrián Barbón, realizará el lunes y el martes un “maratón” de cinco reuniones con otros tantos ministros y ministras del Gobierno central, para revisar el estado de los compromisos del Ejecutivo con Asturias, después de que LA NUEVA ESPAÑA informase de la baja ejecución presupuestaria en 2021 del gobierno de Pedro Sánchez: un 50 por ciento, menor aún en infraestructuras ferroviarias.

A un año escaso del examen electoral, Adrián Barbón mira alrededor y huele “nerviosismo demoscópico” en los otros puestos de salida. Hay otros partidos, observa, que “se están empezando a poner nerviosos”, que “se alteran a medida que van viendo encuestas y hasta han llegado a decir que la legislatura ha finalizado”. El presidente del Principado sale al cruce y dice que no, que su Gobierno opta por “exprimir” este mandato “hasta el final” y vuelve a predecir que esas actitudes complicarán el proceso para que Asturias tenga Presupuesto en 2023. “Veo enormes dificultades derivadas del electoralismo”, repitió.

Hablando como secretario general de la Federación Socialista Asturiana (FSA), ante el comité ejecutivo autonómico reunido este sábado en Cudillero en su sesión de constitución tras completar los procesos de renovación de las agrupaciones locales, Barbón quiso hacer una defensa de lo hecho y de la “unidad” y viveza de su formación descartando una clave veladamente electoral y denostando a los partidos, los otros, que están pensando “no en el interés de Asturias, sino en las elecciones”. Echó mano aquí de Winston Churchill, y de su distinción entre “estadistas” y “políticos al uso”. “Los estadistas, y esa es la obligación de cada uno de vosotros, pensamos en las siguientes generaciones”, no en las siguientes elecciones, reseñó.

Sintetizó el Presidente en tres los grandes desafíos que pueden “exprimir” lo que le queda en el despacho. Habló primero de la “guerra a la burocracia” y aquí respondió sin necesidad de citarlo a IU, el socio de investidura que se ha manifestado abiertamente disconforme con la visión “agilizadora” de procedimientos –“no desreguladora”– que el Principado ha materializado en sus leyes de simplificación administrativa y calidad ambiental. Frente a las acusaciones que ha recibido de la coalición por su acercamiento a Ciudadanos para aprobar la norma medioambiental, Barbón proclamó que está “dispuesto a dialogar con quien sea y siempre mirando a la izquierda”, pero también que “no vamos a paralizar una reforma que creemos clave porque no seamos capaces de llegar a puntos de encuentro puntuales en temas concretos”.

Al llegar al desafío demográfico, segundo del trío de grandes desafíos que pueden “exprimir” este año escaso de mandato, Barbón reprodujo ante sus compañeros de partido lo dicho el miércoles en la Junta: que quiere “un pacto de Estado que se tiene que trasladar a la ley de reto demográfico una vez que recibamos las conclusiones de la comisión” constituida al efecto en la Junta. En el terreno de las medidas concretas, se repite abierto a nuevos incentivos “desde el punto de vista impositivo para facilitar la natalidad”, así como a “deducciones por adopción” y a medidas de “discriminación positiva en los pueblos”, pero también a otras políticas como las facilidades para “todo lo que tiene que ver con la reproducción asistida, donde había un tapón importante”.

Dispuesto a inclinar a su favor incluso las decepciones, el presidente del Principado menciona como tercer gran reto los incumplimientos del Gobierno estatal en la ejecución de sus compromisos inversores con Asturias. Este partido, proclama, “antepone Asturias a cualquier otra cosa, incluso cuando tenemos que discrepar con el Gobierno de España. Cuando algo no nos gusta, alzamos la voz, y yo el primero, sin postureo ni falsas medias verdades”, y en este punto elevó por anticipado las expectativas de la “ronda” de reuniones con ministros y ministras que anunció para el lunes y el martes en Madrid. Ayer, fuentes del Principado llamaron a esto “maratón ministerial” y concretaron que los titulares de carteras visitadas serán cinco, el lunes y por este orden los de Agricultura –Luis Planas– a las 9:30 horas, Industria –Reyes Maroto– a las 14:30, Transición Ecológica y Reto Demográfico –Teresa Ribera– a las 16:00 y Presidencia –Félix Bolaños–, a las 18:00, dejando para el martes a las siete y media de la tarde a la ministra de Transportes, Raquel Sánchez.

“En el Gobierno me abren las puertas para arrancar compromisos de futuro”, adelantó. Fuentes de su Gobierno precisaron que aprovechará las reuniones para “pedir explicaciones sobre la ejecución presupuestaria, lanzar propuestas, reclamar nuevos compromisos e intercambiar información sobre la situación de algunos proyectos estratégicos para Asturias, como la Variante de Pajares o el plan de choque de las cercanías ferroviarias. Además, reclamará que se arbitre un mecanismo que permita un seguimiento escrupuloso de las inversiones previstas en la región”.

Ante el comité autonómico, Barbón usó su versión de presidente exigente para lanzarse a la crítica contra los partidos que “quieren alternancia, no alternativa”, y al recuerdo de las dos oportunidades que tuvo la derecha de gobernar Asturias. En una, dijo, “maltrataron a su presidente, Sergio Marqués, al que el PP humilló por defender los intereses de Asturias”; en la otra, la experiencia del “hombre providencial que venía a salvarnos”, Francisco Álvarez-Cascos, “duró diez meses y acabó con la región a punto de ser intervenida”.

Puso también como contramodelo al PP cuando quiso festejar la renovación y la democracia interna de la FSA, que en menos de cinco años ha cambiado “al 80 por ciento de los liderazgos locales” y ha celebrado dos congresos desde el último del PP asturiano.

Un comité autonómico “itinerante” para conseguir un partido “pegado a la tierra”

Adrián Barbón anunció en Cudillero un comité autonómico “itinerante” en sus reuniones para conseguir un partido “pegado a la tierra” y festejó la renovación y el protagonismo de las mujeres y los jóvenes en el nuevo poder local de la organización. El máximo órgano entre congresos aprobó por unanimidad la composición de la nueva comisión autonómica de listas, donde estarán los dos vicesecretarios generales, Gimena Llamedo e Iván Fernández, y además Clara Sierra, Noelia Macías y Vanesa Fernández en representación de la Ejecutiva Autonómica, y Ana María Vigón, Eduardo Martín, Delia Losa, Manuel Campa, Juan Cañal, José Ramón García y Olaya Rosell por el comité autonómico.