La cifra de enfermos con covid-19 ingresados en los hospitales asturianos ha empezado a descender. Ayer, martes, eran 370 en planta y 14 en las unidades de cuidados intensivos (UCI). El miércoles de la semana pasada (día 14) habian sido 407: en planta 394 y en UCI, 13. Ese dato de 407 es el más alto desde el pasado 26 de abril. O sea, uno de los más elevados de una séptima ola de coronavirus constituida por una sucesión de subidas y bajadas difíciles de prever y de explicar.

Tal y como informó este periódico el pasado sábado, la séptima ola de covid-19 da muestras de empezar a descender en el Principado. Tras cuatro meses y medio de altibajos –siempre dentro de un nivel elevado de contagios–, parece confirmarse día a día que la variante del virus que domina en la actualidad, la BA.5, tiene un campo muy limitado. La misma tendencia se está registrando en el conjunto de España. Y tras la caída de los contagios viene la disminución de los ingresos.

Lo que continúa siendo preocupante es la cifra de muertos. Entre el jueves y el domingo de la semana pasada (días 14 a 17), han fallecido 22 personas por coronavirus, con edades comprendidas entre 75 y 95 años.

El panorama internacional es distinto. El director de la Oficina Regional para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Hans Kluge, advirtió ayer de que en las últimas seis semanas los contagios de coronavirus en los países europeos se han «triplicado» y abogó por el uso de las mascarillas en interiores y medios de transporte. «Con el aumento de casos, también estamos viendo un aumento en las hospitalizaciones, que solo aumentarán aún más en los meses de otoño e invierno a medida que las escuelas vuelvan a abrir, las personas regresen de las vacaciones y la mezcla social se mueva en el interior con la llegada del clima más frío», pronosticó.

No obstante, y a pesar de que las tasas de hospitalización por covid-19 se han duplicado en el mismo período, no lo han hecho los ingresos en las UCI, los cuales «hasta ahora se han mantenido relativamente bajas». Sin embargo, a medida que la incidencia en los grupos de mayor edad continúa aumentando, en Europa todavía mueren cerca de 3.000 personas por covid-19 cada semana.

De otra parte, la vacuna española contra el covid que desarrolla la farmacéutica Hipra, con sede en Amer (Girona), está demostrando una buena respuesta frente a las variantes que circulan actualmente en Europa.