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Los "niños de la guerra" culpan a los bancos del impago de sus pensiones rusas

CC OO pide a Barbón que medie para que cobren el dinero, entre 600 y 900 euros por trimestre, y los afectados apelan al Banco de España

"Niños de la guerra" y familiares en un acto en Gijón. Ángel González

Una veintena de "niños de la guerra" asturianos ya acumulan dos trimestres sin cobrar las pensiones que les paga el Fondo Público Ruso de Pensiones. Las cantidades adeudadas en este medio año se mueven entre los 1.200 y los 1.800 euros, una cifra nada desdeñable. Los afectados culpan a tres bancos en concreto de que devolviesen las cantidades remitidas por Rusia, con la excusa de cumplir con las sanciones impuestas por la invasión de Ucrania. Los afectados, sin embargo, sostienen que "no hay razón alguna para que no les paguen esas cantidades, ya que otras entidades sí lo están haciendo", según aseguró Tatiana Velázquez, presidenta de la Asociación Niños de Rusia y residente en Gijón. "Hemos presentado reclamaciones a los bancos, que son los culpables de lo que está pasando. No hacen más que dar largas. Tardaron dos meses en responder a nuestras reclamaciones y ya llevamos otros dos meses esperando una solución. Ahora estamos preparando una carta para mandarla al Banco de España", dijo esta mujer, que se instaló en Asturias con su marido en los años noventa.

Los "niños de la guerra" no están solos en esta lucha. El sindicato CC OO instó este miércoles al presidente Adrián Barbón a que ponga "en marcha los mecanismos imprescindibles de mediación y de ejecución para que los ‘niños de la guerra’ que todavía no han podido cobrar el dinero que les pertenece, logren que se les ingrese en sus cuentas". Juan José Azcano, de CC OO, indicó que "las economías de estos pensionistas no son precisamente desahogadas", y que "son las personas de menos recursos las que padecen la burocracia interesada de las entidades financieras".

Más de noventa años

La veintena de afectados tiene más de noventa años, y al menos dos de ellos están ingresados en residencias de ancianos. "Les están cobrando las cantidades que deberían haber llegado de Rusia, más de lo que han recibido", explicó Tatiana Velázquez, ella misma también afectada. Su marido, Orlando Velázquez, falleció el pasado mes de marzo con 91 años "sin que le hubiesen ingresado el primer trimestre de la pensión de Rusia".

El gran problema es que alguno de los afectados solo cotizó en Rusia, con lo que carecen de una pensión española y lo que viene del país que les acogió en los años treinta es la única cantidad de que la que disponen. La Asociación Niños de Rusia considera que el impago se debe a una interpretación "errónea y torpe" de las medidas de presión sobre la Federación Rusa, y entienden que a los afectados les asiste el convenio gubernamental entre países, el derecho constitucional español y "el sentido común más elemental".

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