Nueva jornada de atascos en la autopista «Y», mientras crece la indignación entre los conductores por el retraso en la finalización de las obras del tercer carril, causantes en parte del caos sufrido en plena hora punta. En esta ocasión fue una avería a la altura de Paredes (Siero), en sentido a Gijón y Avilés, la que desató los atascos, seguida de una colisión a la altura de la gasolinera del Montico, cerca de la bifurcación de Serín, en sentido a Oviedo y Gijón. La situación no se normalizó hasta las seis de la tarde, tres horas después de la primera incidencia.

En torno a las tres de la tarde comenzaron los problemas. Una avería en un vehículo, justo en el tramo en que la calzada se estrecha por los trabajos de ampliación de la autopista, a la altura de la superficie comercial de Paredes (Siero), causó un tapón que llegó incluso a la entrada de Oviedo, en Santullano, tres kilómetros de longitud, según indicaron fuentes de la Guardia Civil de Tráfico.

Retenciones en la "Y"

Para atravesar este tapón se hacían necesarios más de veinte minutos, para desmayo de los conductores, muchos de los cuales iniciaban en ese momento su descanso de fin de semana o sus vacaciones. Las retenciones se prolongaron por espacio de más de una hora, mientras se retiraba el vehículo averiado.

Muchos conductores expresaron su indignación por el lamentable estado de la carretera, cuyas obras, consideran, se están eternizando -comenzaron en noviembre de 2019 y no está previsto que finalicen hasta octubre de 2023, esto es, 47 meses- y causando grandes trastornos en una arteria que vertebra todo el centro de la región.

El problema es que lo peor estaba por llegar, porque, pasadas las cuatro de la tarde, un accidente en la misma autopista, en las cercanías de la gasolinera del Montico (Carreño), provocó otro monumental atasco, esta vez de hasta cinco kilómetros de longitud, en sentido a Oviedo y Gijón, después de que dos furgonetas colisionasen contra un vehículo de transporte especial que llevaba una pieza pesada. Este siniestro dejó dos heridos que fueron evacuados al hospital.

Todo comenzó después de que un transporte especial que llevaba una gran pieza de un generador eólico sufrió una avería, en concreto un pinchazo. El hecho de que la avería estuviese convenientemente señalizada no impidió que colisionasen contra este vehículo una furgoneta Ford Transit y una furgoneta Peugeot Parnet. Una de ellas quedó empotrada en el vehículo de transporte especial, con matrícula portuguesa. A consecuencia de esta triple colisión fue necesario cortar uno de los carriles de la autopista en sentido Gijón y Oviedo, con el consiguiente trastorno para la circulación que en ese momento era muy intensa.

Accidente en la A-8

A la zona se desplazaron agentes de la Guardia Civil de Tráfico, así como medios de SAMU para atender a los heridos. Hasta la retirada de los vehículos, que se produjo en torno a las seis de la tarde, no se normalizó la situación, según indicaron fuentes de la Comandancia de Gijón.

El último atasco de este estilo se produjo el pasado 26 de julio. Los efectivos de Tráfico cerraron a la circulación el carril derecho de la autopista, a la altura del kilómetro 22, en Lugones, debido a una avería mecánica. El cierre de este carril, en sentido a Gijón y Avilés, causó grandes retenciones. Unos días antes, el domingo 17 de julio, el incendio de un coche causó retenciones kilométricas a la hora del regreso de las playas en sentido a Oviedo, coincidiendo además con un accidente en la misma carretera a la altura de Trasona.