El Gobierno regional sacó ayer adelante el acuerdo sobre las bases que regirán en el proceso de estabilización para 2.061 plazas de personal de administración del Principado, gracias al apoyo de la federación que agrupa a los sindicatos sanitarios y docentes. La dirección de Función Pública salvó el acuerdo en la mesa general de la Administración del Principado con los votos de UGT, CC OO y FESES, la federación de los sindicados sanitarios y docentes que solo cuenta con un delegado en el ámbito administrativo. Los dos sindicatos mayoritarios en ese sector, CSIF y USIPA votaron en contra. "No agrada a nadie", afirmó José Luis González de USIPA. "Son unas bases para seguir manteniendo ciertos chiringuitos", aseguró Sergio Peña, de CSIF.
Las normas pactadas regirán para el proceso selectivo de concurso de 1.903 plazas, en el que no habrá examen, y en las 158 que se resolverán por concurso oposición. Las bases de baremación se presumen decisivas en unos procesos que tienen como objetivo reducir la temporalidad en la administración del Principado y valorar la experiencia del personal temporal, que en muchos casos acumula décadas de servicio, pero sin vulnerar los principios de mérito, igualdad y capacidad, ya que estas pruebas serán abiertas, no están restringidas al personal autonómico. Sobre un total de 100 puntos, sesenta puntos serán para la antigüedad que se acredite en las plazas convocadas, que se otorga a quien acumule 17 años de trayectoria en el Principado. Los años de experiencia fuera de la administración regional se valorarán en una cuarta parte: un año completo en el Principado puntúa 3,5 mientras que en otra administración, 0,8 puntos. La superación de al menos de dos exámenes en oposición anteriores supondrá otros 20 puntos, mientras que los cursos de formación o la carrera profesional valdrán hasta 17 puntos. Por último, tener titulaciones académicas o profesionales dará otros tres puntos.
