El Ministerio Transportes obvia el principal escollo de las obras del AVE entre León y La Robla

El Ministerio de Transportes ha aportado en las últimas horas un sinfín de explicaciones sobre el estado de las obras de construcción de la línea de alta velocidad a Asturias, pero ni siquiera ha dedicado una mención al principal escollo que afecta en la actualidad a esos trabajos, y que demorará la finalización de todo el trazado, al menos, hasta finales de 2024: la integración de las vías a su paso por el municipio de San Andrés del Rabanedo, a las afueras de la ciudad de León. Porque no hay ni siquiera proyecto, y mientras tanto un grupo de vecinos, constituidos en una plataforma, está "en pie de guerra", exigiendo que se recupere la propuesta inicial, que contemplaba el soterramiento de las vías.

Transportes ya ha dicho "no" al soterramiento, y ha prometido un proyecto de "integración" que debería haber entregado ya al Ayuntamiento, para que las autoridades municipales examinen la propuesta y realicen las alegaciones y observaciones que estimen pertinentes. La plataforma que defiende el soterramiento de las vías ya ha adelantado que se opondrá a cualquier otra solución y protagoniza actos de protesta todas las semanas en el pueblo.

El trazado actual de la línea ferroviaria en San Andrés del Rabanedo impide su catalogación como de alta velocidad, por lo que, aunque se abra la variante de Pajares, los trenes tendrán que seguir las indicaciones y limitaciones de las líneas convencionales a su paso por este tramo. Entre otras obras a realizar, destaca la demolición de un puente bajo el que avanzan las vías, que no cumple los mínimos de altura y anchura exigidos por las normativas española y europea para líneas de alta velocidad. Una demolición que debió realizarse hace ya varios años, pero que sigue en espera.

Renovada solo una vía

Sobre el tramo León-La Robla de la alta velocidad a Asturias el Ministerio se ha limitado a señalar que ya se ha renovado una de las vías en todo el trazado, mientras que en la otra solo se ha hecho entre Santibáñez y La Robla. El tramo cuenta también con traviesas aptas para instalar el tercer hilo, lo que permitirá circular tanto en ancho ibérico como en ancho estándar. Asimismo, está ya adecuada la electrificación, según Transportes. Ha concluido también la construcción de dos puentes que han permitido suprimir dos pasos a nivel, y el cerramiento de todo el trazado. 

En la actualidad, el Ministerio asegura que ultima la redacción "del nuevo proyecto de obras para concluir los trabajos de renovación en este tramo, así como implantar en él el tercer hilo". Y ha avanzado que prevé la licitación del contrato de obras se lance "en los primeros meses de este año". Este contrato permitirá completar la renovación de la vía pendiente; la adecuación de la electrificación al ancho mixto, así como el montaje del tercer hilo. "Si las obras se desarrollan con normalidad, los trabajos estarían concluidos a finales de 2024", ha aventurado el Ministerio. Claro que después aún restarían las pruebas de circulación. Por último, en la actualidad se acometen las labores para la adecuación de los sistemas de señalización y telecomunicaciones de la línea. 

El departamento que encabeza Raquel Sánchez ha subrayado dos aspectos. El primero, que la ejecución de los trabajos entre León y La Robla "no compromete la puesta en servicio de la Variante de Pajares", aunque los trenes, como se ha dicho, deberán circular por un tramo convencional. Y segundo, que trabajos del tramo León-La Robla "apenas tienen incidencia sobre los tiempos de viaje León-Asturias, puesto que la implantación del tercer hilo y ERTMs no van a suponer un aumento de la velocidad actual en el tramo, de 160 kilómetros por hora, ni imponen ninguna restricción en cuanto a la tipología de los trenes que vayan a circular por la Variante.

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