Los vecinos de Somao (Pravia) aún recuerdan aquellos veranos en los que el pueblo se llenaba de seguridad para las vacaciones estivales de Ángeles Amador, ministra de Sanidad en el Ejecutivo de Felipe González. Junta a ella viajaban sus tres hijos, uno de ellos, Pablo Bustinduy, el flamante ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2023.
Es el mediano de tres hermanos y con apenas cinco años ya empezó a correr por el parque del pueblo y a bañarse en la playa de Aguilar. De adolescente hizo lo propio y no se perdía una romería. A día de hoy, sigue disfrutando de unos días al año de descanso en el pueblo. Este mismo mes de agosto estuvo en Somao junto a su madre, su hermano, su mujer y su hija en la casa que aún mantiene la familia en la localidad praviana, un chalet del que se enamoraron sus abuelos y en el que solían reunir a toda la familia.
“Es muy buena persona y se relaciona con todo el mundo”, sostiene Carmina Inclán, una de las vecinas a las que suele visitar a su regreso al pueblo. Dice de él que es un “chaval muy cercano y tan bueno como su madre”. Inclán, conocida por su maña con las agujas de tejer, lo espera este verano para entregarle el jersey de lana que le prometió a Pablo Bustinduy y también “una chaquetina para su hija”.
El 'errejonista' regresa al ministerio que dirigió su madre
Entre 1991 y 1996, la socialista Ángeles Amador recorrió los pasillos de la Casa Sindical de Madrid, un edificio de ladrillo y piedra que se alza como una mole en el Paseo del Prado, a escasos metros de la Estación de Atocha. Primero, lo hizo como subsecretaria de Sanidad y Consumo, después, como ministra de ambas ramas. Ahora será su hijo, Pablo Bustinduy, quien pulule por los mismos corredores como ministros de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, una cartera heredada de Ione Belarra y que también contendrá las competencias de Alberto Garzón.
Bustinduy (Madrid, 1983) ha sido una de las apuestas más sorprendentes de Yolanda Díaz. La líder de Sumar le fichó a principios de junio para dar la batalla electoral del 23-J. Desde entonces, ha formado parte del equipo cercado de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo. Y lo seguirá siendo. Ahora, ejerciendo como ministro del nuevo Gobierno de Pedro Sánchez y asumiendo algunas tareas que ya estuvieron en manos de su madre hace casi 30 años.
Licenciado en Ciencias Políticas y de la Administración por la Universidad Complutense de Madrid y en Psicología por la UNED, Bustinduy se fue especializando en política internacional. Curso estudios en Francia y en Estados Unidos y trabajó como investigador y profesor en varias universidades de este último país. Su salto a la política se produjo en 2014, tras el 15-M, y con la irrupción de Podemos. Fue el coordinador de la delegación morada en el Parlamento Europeo después de que aquel año se hicieran con cinco escaños en la Eurocámara.
Al año siguiente entró en la dirección del partido y logró un escaño en el Congreso de los Diputados. Bustinduy, que trabajó como asesor de Iglesias en el Parlamento Europeo, se alineó en 2017 con Íñigo Errejón en la segunda asamblea estatal de Podemos, la conocida como Vistalegre II. En aquella cita, Iglesias se impuso de manera clara ante Errejón y se empezó a producir un cisma en la formación que acabaría con la salida de este último en enero de 2019.
Pese a su cercanía a Errejón, Bustinduy salió elegido en primarias como candidato de Podemos a las elecciones europeas de 2019. Sin embargo, meses antes renunció a encabezar las listas de la coalición Unidas Podemos Cambiar Europa y anunció su intención de alejarse de la primera línea política. Fue entonces cuando María Eugenia Rodríguez Palop tomó las riendas de este proyecto.