¿Una Navidad libre de infecciones respiratorias en Asturias? Así nos afectarán la gripe y el covid-19 estas fiestas

La región se halla bajo una fuerte ola del virus respiratorio sincitial

Los expertos prevén que el pico de la epidemia gripal llegue a finales de enero

¿Una Navidad libre de infecciones respiratorias en Asturias? Así nos afectarán la gripe y el covid-19 estas fiestas

¿Una Navidad libre de infecciones respiratorias en Asturias? Así nos afectarán la gripe y el covid-19 estas fiestas / LNE

Pablo Álvarez

Pablo Álvarez

Al contrario de lo sucedido el año pasado, la Navidad que está a punto de llegar no vendrá acompañada de numerosos casos de gripe ni de covid-19. El panorama actual en Asturias se caracteriza por una fuerte presencia del virus respiratorio sincitial (VRS), causante de la bronquiolitis, que suele ser el telonero del virus gripal. De cumplirse las predicciones de los expertos, la curva de la gripe comenzará a subir –aún no se ha detectado ese ascenso– en un plazo relativamente breve, y el pico de la curva se registrará probablemente en el último tramo de enero y el primero de febrero. En cuanto al covid, los especialistas coinciden: ni está ni, de momento, se le espera.

En las fiestas navideñas del año pasado se vendieron en las farmacias de la región numerosos tests de gripe y covid. A no poca población, un virus respiratorio le estropeó las celebraciones en familia. En esta ocasión –al menos hasta la fecha– la situación es muy diferente. "Entre octubre y noviembre se detectó una cierta circulación de virus gripales B, que produjeron una pequeña onda epidémica de muy baja intensidad y que afectó principalmente a menores de 15 años y muy poco a las personas mayores", explicó ayer a LA NUEVA ESPAÑA un atento observador de evolución epidemiológica.

Mientras tanto, los virus gripales A, que son los principales causantes de las ondas epidémicas intensas en invierno, han comenzado a circular desde finales de noviembre y aumentan poco a poco. ¿Cuándo se disparará la curva hacia arriba? Con la gripe, la respuesta no es fácil porque el momento de eclosión de la onda nunca es previsible. Lo que sí suele repetirse un año tras otro con bastante similitud es el patrón de ascenso y descenso de la curva. Dicho lo cual, la respuesta es que la gripe inicia su escalada cuando comienza a descender el virus respiratorio sincitial.

En la presente temporada, los VRS comenzaron a circular activamente desde principios de noviembre y están actualmente "en una incidencia muy alta, probablemente en el pico de este año", precisa un médico de la región. Una vez que los virus sincitiales alcancen el culmen e iniciado el descenso, el virus de la gripe A comenzará a propagarse a mayor velocidad.

Las repercusiones del los VRS han disminuido con relación al pasado. El motivo es la campaña de aplicación, iniciada en 2023, de un tratamiento de inmunización frente al virus respiratorio sincitial en neonatos y lactantes que una vez más parece estar dando buenos resultados. Al igual que la temporada pasada, el uso de los anticuerpos protectores "está teniendo un impacto muy importante en la prevención de los casos graves en los menores", indica un experto, quien aprecia "muy buenas coberturas que producen una reducción muy significativa de los ingresos por estas infecciones con respecto a las temporadas anteriores".

Sobre el covid-19, la buena noticia es que no hay noticia. La circulación del virus está en niveles muy bajos desde finales del verano, y no hay indicios de que este invierno ocurra una nueva onda epidémica. "Los pocos virus que se aíslan siguen siendo subvariantes de los virus ómicron y las vacunas adaptadas que se han utilizado este año ofrecen buena protección frente a ellos", apunta un buen conocedor de los vericuetos epidemiológicos.

El inicio habitual, entre diciembre y enero

Para los virus de la gripe (gripe A y gripe B), el patrón habitual es que se produzca una onda epidémica durante los meses fríos. El comienzo suele darse entre diciembre y enero. Esta pauta se interrumpió durante las temporadas de la pandemia de covid-19 por el uso general de medidas de protección (mascarillas). Algunos años han ocurrido dos ondas epidémicas diferentes (más o menos consecutivas) por la circulación de virus gripales diferentes en la misma temporada.

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