De la política a los pinceles

Rocío Monasterio pinta mucho en Asturias

"Me encanta recorrer la región con mis cuadernos", asegura la exportavoz de Vox en la Asamblea de Madrid, que ha vuelto al andamio como arquitecta y también a las acuarelas, con Ponga y Ribadesella entre sus "modelos"

Rocío Monasterio, con sus perros "Quinta" y "Six", de paseo por Viego, el pueblo pongueto de origen de su familia paterna.

Rocío Monasterio, con sus perros "Quinta" y "Six", de paseo por Viego, el pueblo pongueto de origen de su familia paterna. / Irma Collín

Mariola Riera

Mariola Riera

"A todo lo que sea promocionar Asturias me apunto", dice Rocío Monasterio a LA NUEVA ESPAÑA. La exdiputada y exportavoz de Vox en la Asamblea de Madrid anda "por el andamio", como ella misma explica. Literal. Es arquitecta de profesión y ahora, una vez que se ha apartado –o más bien la apartaron– de la política activa, ha vuelto a los planos y a las obras.

Pero también tiene ahora más tiempo para cultivar una de sus aficiones, la pintura, y de paso, como ella mismo explica, promocionar Asturias. Porque en sus redes sociales exhibe de vez en cuando sus acuarelas, y la última ha sido un reconocible –por sus montañas y colores– paisaje de Ponga, concejo de origen de su familia paterna y en el que aún conservan propiedades los Monasterio, concretamente, en la aldea de Viego. Por parte de madre también tiene raíces asturianas: en Ribadesella.

Rocío Monasterio pinta mucho en Asturias

Acuarela de Rocío monasterio hecha en Ribadesella. / Cedida

"Este dibujo es de una cabaña de uno de los pastores de Ponga, en Asturias. Un sitio maravilloso", describe de la citada acuarela, orgullosa de la tierra de sus orígenes. "Si no la conocéis tenéis que ir, es un paraíso, una preciosidad".

La arquitecta y empresaria abunda: "Me gusta trepar como un rebeco y dibujar, es una forma de entender el paisaje, de fijarse en sus colores, la luz, la textura... Pienso mucho en cómo con los móviles hemos perdido capacidad para fijarnos, escuchar y disfrutar de lo que tenemos alrededor". Explica que suele trasladarse por la región. "Realmente tengo muchos cuadernos, me encanta recorrer Asturias pintando. Siempre que puedo estoy por allí arriba".

Arriba, dos acuarelas de Rocío Monasterio hechas en Ponga y Ribadesella; a la izquierda, ella, con sus perros «Quinta» y «Six», de paseo por Viego, el pueblo pongueto de origen de su familia paterna. | IRMA COLLÍN/ CEDIDAS

Acuarela de Rocío Monasterio hecha en Ponga. / Cedida

De sus visitas y veraneos atesora un buen número de acuarelas. En Ribadesella suele pasar gran parte del verano con los suyos. "Nosotros somos de Ponga, familia emigrante a Cuba, mi tatarabuelo salió desde Ribadesella en el barco ‘Habana’ y volvimos", cuenta.

Monasterio fue peso pesado en Vox junto a su marido, Iván Espinosa de los Monteros. Éste dejó por sorpresa la política y el partido a principios del verano de 2023, una decisión que se atribuyó a sus desencuentros con el presidente, Santiago Abascal. A Rocío Monasterio le auguraban el mismo camino, aunque lo suyo tardó más: la ahora arquitecta aguantó año y medio como presidenta y portavoz en la Asamblea de Madrid desde la marcha de su marido hasta que fue destituida del primer cargo. Ella optó por dejar el escaño y la política. Ahora trabaja en su estudio de arquitectura y no pierde de vista la tierra de sus orígenes: "Hay que conseguir que los nuevos indianos inviertan en Asturias".

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