Controvertida votación en el congreso

Lo que pasará con las pensiones, que suben este mes pero "bajarían" en febrero

El Gobierno puede salvar la revalorización con un nuevo decreto que el PP se presta a apoyar

Lo que pasará con las pensiones, que suben este mes pero "bajarían" en febrero

Atlas News

Gabriel Ubieto / L. G.

Los más de diez millones de pensionistas que viven en España cobrarán esta semana la nómina de sus prestaciones con la subida que les correspondería para este año. Un 2,8% superior en el caso de las contributivas y de entre el 6 y el 9% en el caso de las mínimas o las no contributivas. La orden de pago está dada, confirmó ayer el Gobierno. No obstante, una vez que el Congreso ha tumbado el real decreto-ley del Ejecutivo que incluía, entre otras decisiones, esa revalorización, en la nómina de febrero las prestaciones bajarían y volverían los importes de 2024 si en este tiempo el Consejo de Ministros o el Parlamento no toman medidas extraordinarias para evitarlo. Los concernidos en Asturias son 300.000 pensionistas: más de 270.000 perceptores de pensiones contributivas, otros 18.500 que cobran las pensiones de las Clases Pasivas (antiguo régimen de los funcionarios) y casi 9.000 beneficiarios de pensiones no contributivas, las más modestas del sistema.

Cada mes la Seguridad Social, a través de las entidades bancarias, abona las pensiones de las que vive, a la luz de las citadas cifras, casi un tercio de los asturianos. Fuentes del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones aseguraron ayer que "el cobro y la subida de las pensiones en el mes de enero están asegurados gracias a que el decreto ley ha estado vigente hasta hoy (por ayer)". PP, Junts, Vox y UPN, cuyos votos han frenado el llamado decreto omnibús en el Congreso, "tendrán que explicar por qué han recortado las pensiones en 2025 y por qué los pensionistas, después de ver revalorizada su pensión en enero, van a tener que soportar que sea más baja en febrero", expusieron esas fuentes ministeriales.

Desde el punto de vista jurídico, y aunque ello no tenga efectos instantáneos, la revalorización de las pensiones queda formalmente suspendida hasta que otra norma llene el vacío legal. Con el propósito de que el castigo político de los partidos que lideran Alberto Núñez Feijóo y Carles Puigdemont al Gobierno de Pedro Sánchez no acabe en el bolsillo de los pensionistas, el PP ha presentado de inmediato una proposición de ley para que el Congreso debata y apruebe una subida idéntica a la propuesta por el Ejecutivo. Y los de Junts han expresado su disposición a apoyar un nuevo decreto del Consejo de Ministros específico para las pensiones.

Si bien el Gobierno, y también el PSOE, se centraron ayer en señalar la "responsabilidad" de quienes votaron en contra en el Congreso, lo más probable es que el Consejo de Ministros apruebe en breve un nuevo real decreto ley. El PP también ha adelantado que lo apoyará si el Gobierno no aprovecha para incorporar en él otros contenidos con los que pueda no estar de acuerdo. Siendo así, la subida de las pensiones no debería sufrir ningún nuevo sobresalto. Máxime porque la revalorización conforme al índice de precios al consumo (IPC) es un mandato de la ley general de Seguridad Social, de forma que puede ser aprobada por el Gobierno mediante un real decreto a secas, que no precisa convalidación parlamentaria. Una solución así blindaría el alza del 2,8%, pero no los incrementos extra previstos para las pensiones mínimas (6%) y las no contributivas (9%).

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