"Matar lobos no es la solución", claman los proteccionistas durante una protesta en Oviedo

«Matar lobos no es la solución». Se puede decir más alto, pero no más claro. Diversos colectivos conservacionistas se concentraron este domingo en Oviedo, convocados por el Grupo Lobo Asturias, para protestar contra la decisión de retirar la protección a la especie al norte de Duero, lo que abre la posibilidad de matar ejemplares con el fin de controlar su población y evitar ataques al ganado, algo que reclaman desde hace años, desesperados, los ganaderos.

Pero lo que está claro para unos, es decir, el Gobierno del Principado y el sector agroganadero en su amplia mayoría, no lo está para otros, los conservacionistas, dispuestos a dar la batalla en la calle y también en los tribunales. Porque tal y como advirtieron este domingo, nada más que el Ejecutivo regional presente –algo que se prevé para el próximo jueves 10 de abril– su plan de gestión para el lobo, en el que figurará el número a abatir y los lugares, éste será recurrido en los tribunales. 

«El lobo no se vende, se defiende» o «Asturias Paraíso Criminal» fueron algunos de los lemas coreados durante la concentración en Oviedo, ante la sede de Presidencia de Asturias –la petición de dimisión de Adrián Barbón fue constante, al igual que la de la Presidenta de Cantabria (PP), donde quieren abatir más de 40 animales–, en la que hubo imitación de aullidos de lobo, algún que otro perro, peluches, caretas... 

Todo para llamar la atención de que «matar lobos no es la solución» porque, aseguran, hay pruebas científicas que indican que esto produce todo lo contrario, que aumenta los daños.

Si algo ha quedado claro, sobre todo, es que la gestión del lobo genera posiciones encontradas de muy difícil entendimiento. Porque los conservacionistas tienen en su punto de mira a los ganaderos, a los que enviaron varios mensajes. «El lobo es de todos, cuida tu ganado», claman a modo de crítica, ya que consideran que si vacas y cabras mueren atacadas por el cánido en los pastos, es por la falta de responsabilidad de sus dueños, que no las protegen.

Grupos de presión

En el comunicado, leído por Carmen García, de Liberación Animal Asturias, se tachó a los ganaderos de «grupo de presión mentiroso» y se criticó a los partidos que aprobaron la desprotección del lobo –PP, Vox, Junts, PNV–, tan «antagónicos» habitualmente y ahora unidos. Al Gobierno de Adrián Barbón se le reprochó las «prisas por matar lobos» y se arremetió contra el «envenenamiento, la crueldad y el furtivismo» que es, en opinión de los proteccionistas, lo que ha puesto al lobo al borde de la desaparición.

«Es una especie amenazada, estuvo a punto de extinguirse. Hablando del lobo desvían el tiro de los verdaderos problemas del sector ganadero, como los precios de la carne, la leche, los costes de producción al alza...», advirtieron. Además, reclamaron la retirada de las subvenciones al campo. «Es necesario que dejen de vivir del cuento», gritaron algunos.

Fueron algo más de dos centenares de asistentes, no solo de Asturias, sino de otras comunidades como Madrid, Castilla y León o Cantabria. La protesta asturiana –que no fue la única de este tipo, pues hubo también en otros lugares de España– concluyó con una nueva convocatoria, para el 10 de abril (11 horas), ante la sede de la Consejería de Medio Rural en Oviedo, cuando se reunirá el Consejo Consultivo del Lobo.