Los consejeros más veteranos que se han convertido en pilares indiscutibles de Barbón

Solo hay dos miembros del Gobierno de Barbón que ya eran consejeros en la anterior legislatura, la primera con el actual presidente al frente. Se trata precisamente de Borja Sánchez y Alejandro Calvo, quienes ahora recibirán troceadas las competencias de la consejería de Transición Ecológica, Industria y Comercio, llamada a desaparecer tras el grave accidente de la mina de Cerredo y la dimisión de su titular. No es casualidad que ambos hayan sido los elegidos por Barbón para incrementar sus competencias.

Desde fuentes del Ejecutivo se apunta al necesario paso adelante que tendrá que dar Borja Sánchez, que pasará a ser titular de una cartera cuyo nombre será el de Ciencia, Industria y Empleo. Sánchez es amigo de infancia de Barbón y su perfil es claramente de gestión, con menos relevancia orgánica en el PSOE que otros miembros del Gobierno. Es habitual que en los plenos de la Junta, mientras se producen reproches entre la oposición y el Gobierno, este mierense de 46 años, licenciado en Biología y doctor por la Universidad de Oviedo, acelere asuntos pendientes desde su tableta electrónica, ajeno a los cruces dialécticos. Ha tenido muy pocas confrontaciones desde que ocupa un asiento en el Consejo de Gobierno. Tendrá ahora que asumir un asunto espinoso: la gestión de las competencias en Industria y ejercer con transparencia la "regeneración" en el área de Minería.

Sánchez está afiliado a la FSA, si bien ha estado al margen de las batallas internas; pero ha ido aumentando su influencia en el partido, aunque no destaca por su dedicación a la organización . Su proyección ha estado ligada siempre a su acción en la Consejería. De hecho, fuentes cercanas al Ejecutivo le describen como el miembro del Gobierno que más ha crecido desde 2019. Lo ha hecho sin tener experiencia política alguna. De ser un Consejero de perfil bajo, desconocido para el gran público hace seis años, es ahora uno de los principales pilares del Ejecutivo, y ve aumentada su influencia.

Alejandro Calvo, por su parte, representa una cara amable del Gobierno y con gran predicamento en el partido. Con un perfil reflexivo y analítico, destaca por no tomar decisiones en caliente y pensar muy bien cada paso. Tiene un perfil mucho más político que Sánchez. Ahora será Consejero de Movilidad, Medio Ambiente (área que estaba en Industria) y Gestión de Emergencias. Ingeniero agrónomo e ingeniero técnico agrícola, nacido en Cangas del Narcea en 1974, Calvo tiene ya una dilatada experiencia en cargos políticos. A saber: director general de Política Forestal (2008), director-gerente de la Sociedad Gestión de Infraestructuras Culturales, Turísticas y Deportivas (2009-2012), viceconsejero de Cultura y Deporte (2012-2015) y director-gerente de la Sociedad Pública de Gestión y Promoción Turística y Cultural (2015-2019). Barbón le nombró en la anterior legislatura Consejero de Medio Rural y Cohesión Territorial y después pasó a Movilidad.

Su principal apoyo el área que gestiona es Jorge García, viceconsejero de Movilidad, con el que conforma buen tándem, según fuentes del Ejecutivo.

Borja Sánchez y Alejandro Calvo se convierten así en dos piezas clave del Ejecutivo para lo que resta de mandato: el primero como columna económica; el segundo como pilar de la movilidad y el territorio. Precisamente con quienes Izquierda Unida deberá coordinarse como titular de las competencias de Ordenación del Territorio.

Suscríbete para seguir leyendo