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¿Cuánto cobra un cronista oficial y a qué se dedica? Todo lo que debes saber sobre los 30 asturianos que se encargan de narrar la historia

Funciones, derechos, deberes, atributos y partidas presupuestarias de los abogados de oficio de la historia local

De pie, de izquierda a derecha, cronistas oficiales de Asturias con el alcalde de Oviedo: Xulio Concepción (Lena), Miguel Ángel Fuente Calleja (Noreña), José Luis Cabo (Riosa), Juan José García González (Muros de Nalón), Armando Barrero (Allande), Francisco José Rozada (Parres), Carmen Ruiz-Tilve (Oviedo), Alfredo Canteli (alcalde de Oviedo), Juan Luis Álvarez del Busto (Cudillero), Andrés Martínez Vega (Infiesto), Luis Miguel Piñera (Gijón), Juan Manuel Estrada (Caso), Rosa María Rodríguez (Las Regueras), José Ramón Rodríguez (Corvera), Leocadio Redondo Espina (Nava) –semitapado–, Pepa Sanz Fuentes (Avilés) y Miguel González Pereda (Villaviciosa). Agachados, por la izquierda, Roberto Fernández Osorio (Quirós), Gustavo Adolfo Fernández (Grado), Juan José Domínguez (Siero), Luis Miguel Montes Arboleya (Bimenes), Celso Peyroux (Teverga), Luis Casteleiro Oliveros (Vegadeo) y Fernando Delgado (Morcín). | Fernando Rodríguez

De pie, de izquierda a derecha, cronistas oficiales de Asturias con el alcalde de Oviedo: Xulio Concepción (Lena), Miguel Ángel Fuente Calleja (Noreña), José Luis Cabo (Riosa), Juan José García González (Muros de Nalón), Armando Barrero (Allande), Francisco José Rozada (Parres), Carmen Ruiz-Tilve (Oviedo), Alfredo Canteli (alcalde de Oviedo), Juan Luis Álvarez del Busto (Cudillero), Andrés Martínez Vega (Infiesto), Luis Miguel Piñera (Gijón), Juan Manuel Estrada (Caso), Rosa María Rodríguez (Las Regueras), José Ramón Rodríguez (Corvera), Leocadio Redondo Espina (Nava) –semitapado–, Pepa Sanz Fuentes (Avilés) y Miguel González Pereda (Villaviciosa). Agachados, por la izquierda, Roberto Fernández Osorio (Quirós), Gustavo Adolfo Fernández (Grado), Juan José Domínguez (Siero), Luis Miguel Montes Arboleya (Bimenes), Celso Peyroux (Teverga), Luis Casteleiro Oliveros (Vegadeo) y Fernando Delgado (Morcín). | Fernando Rodríguez

Pepe Monteserín

¿Cuál es el origen del cronista?

"Cronos", sin entrar en detalles, significa tiempo. Cronista es quien registra eventos en orden cronológico: de ahí Cronicones, la Rerum Gestarum in Hispania, Historia de los Godos, de Rodrigo Jiménez de Rada, del siglo XIII...

Alguien definió al cronista como abogado de oficio de la historia; no es funcionario ni administrativo, es un cargo de autoridad y de honor, "ve el ayer con exactitud, como si fuera hoy, y contempla al hoy con rectitud, como si fuera ayer", con interés desinteresado y criterio insobornable.

¡Y que grata palabra, "cronista", para todos los géneros!

¿Qué significa cronista oficial?

Lo de oficial viene de officium, palabra viscosa, dice mi colega Manuel Peláez del Rosal, cronista de Priego, Córdoba. Oficial por oficio, al decir de Cervantes un golfo profundo de confusiones, y oficial por mando en plaza, que escribe con inteligencia y conocimiento la crónica de su jurisdicción.

Imprime carácter de "oficial" que sea nombrado en el Pleno del Ayuntamiento o corporación pertinente a propuesta de algún concejal o grupo político.

¿De dónde pueden ser cronistas?

De localidades, municipios, provincias, comunidades autónomas y del Reino de España; incluso los hay de comarcas, cofradías y hasta de papas. Dante Alighieri fue cronista del Infierno, y Londoño Martínez escribió crónicas de eventos celestiales.

Cronistas célebres

Las Res Gestae de Amiano Marcelino relatan eventos del siglo IV. En el XII, Giovanni Villani cuenta en la Nuova Cronica la historia de Florencia; las Chroniques de Jean Froissart son del siglo XIV; Bernal Díaz del Castillo fue Cronista de Indias. En 1547, las Cortes de Monzón nombraron cronista del Reino de Aragón a Jerónimo de Zurita.

El primer cronista oficial fue el de Valencia, en 1848, Vicente Boix, y lo fueron el Marqués de Lozoya, por Segovia, en el siglo XVII; Gabriel Miró, de Barcelona (1919); Camilo José Cela, en Padrón (La Coruña), en 1949; Álvaro Cunqueiro, de Mondoñedo (Lugo), en 1960; en su tumba leí: "Aquí yace alguien que, con su obra, hizo que Galicia durase mil primaveras más".

¿Quién puede ser cronista oficial?

Cualquier persona elegida en pleno del ayuntamiento o administración pública. Antes debe aprobarse el Reglamento Regulador de la figura del Cronista. ¿Títulos? Puede no ser nada, ni siquiera académico (que ya es decir), pero conviene que cuente con estudios bastantes que no haya dado al olvido.

Atributos y derechos

Tratamiento de "ilustrísima señoría", derecho al nombre de "cronista oficial", al uso de medalla y emblema de la corporación y derecho al estrado, como concejal honorario con voz y sin voto. Derecho a ser oído en convocatorias de concursos y premios, en convenios con instituciones y hermanamientos por lazos históricos o destinos comunes; pertenencia a comisiones de patrimonio, bellas artes, urbanismo, edición de libros, actos públicos, iniciativas turísticas, fundaciones; como enlace con la opinión vecinal; en actos oficiales del municipio o la provincia que por su importancia y proyección lo amerite, y que le sean proporcionados los medios materiales para desarrollar su actividad, facilitándole el acceso a inmuebles municipales, provinciales, archivos históricos y administrativos, hemerotecas, museos, prensa...

De otra manera, al cronista le queda el derecho de atreverse a todo; también desde la ficción puede contarse la realidad; "Guerra y paz" es un ejemplo.

Deberes

"Ha de ser Imparcial y crítico, decir la verdad del pasado o del presente, hasta atrapar la atmósfera que respira y revelar el secreto que solo apasionadamente descubre y vive para contarlo, dejando su alma en la travesía de la vida, desde la última vuelta del camino, en el que ningún tema, hecho y vivencia le serán asunto ajeno". (Régimen Jurídico del Cronista Oficial, de Manuel Peláez del Rosal).

"Misión honrada de todo cronista no es adular ni dar satisfacciones sino testimoniar de la mejor manera los sucesos de su tiempo, tal y como los vio, tal y como entendió verlos, tal y como otros acontecimientos por él no vistos, recibió de quienes los vieron y le dieron puntual noticia". (Salvador Llopis, cronista oficial de Salamanca).

Me decía mi abuelo, Emilio Corrales Aguirre: "Sé tú mismo".

¿Cuánto dura el cargo?

Su nombramiento es indefinido, asimilado al derecho propio de un funcionario de carrera (Apartado XI del Estatuto de Cronista Oficial) y de carácter vitalicio; salvo que dimita, dura hasta que se muera o lo maten.

¿Cuánto cobra?

Es un cargo ad honorem (poco menos que una enfermedad) pero el carácter gratuito no significa que carezca de las compensaciones necesarias para llevar a buen término su tarea; tiene derecho al devengo de gastos por su trabajo: ediciones, imprentas, bibliografía, suscripciones, desplazamientos para los que sea comisionado, asistencia a congresos y reuniones, en calidad de invitado o ponente, incluidos cursos formativos y cuotas por pertenencia a otras asociaciones que convengan al cargo.

¿Cuántos cronistas oficiales hay en Asturias?

Actualmente 30 (tres mujeres), para 78 concejos; Peñamellera Alta y Baja tuvieron a uno, Cecilio Testón, y los tres Oscos cuenta con José Antonio A. Castrillón. Hubo un Coppen, en Lugones; hay un Pedro R. Cortés (2008), en el Centro Asturiano de Oviedo; hubo un Joaquín Manzanares (1980) por Asturias. Desde la Asociación de Cronistas Oficiales de Asturias (ACOA) procuramos que todos los concejos cuenten con su cronista y deseamos savia nueva y más mujeres, o sea, savia nueva.

¿Cómo nombrar a un cronista?

A un servidor lo propuso Antonio de Luis Solar, alcalde de Pravia por el PSOE (2003-2015); aunque nunca aspiré a ese cargo, soy más escritor de ficción que historiador, no supe negarme, es un honor que sería un deber y que es un placer.

Antes fue necesario crear el Reglamento Regulador de la figura del Cronista Oficial de Pravia y su concejo, que se aprobó en Pleno del Ayuntamiento el 29 de noviembre de 2012 con el "compromiso expreso del Ayuntamiento de proporcionarle los medios necesarios para el desarrollo de su actividad". Fui elegido el 18 de abril de 2013, con ocho votos del PSOE y PP, y cinco abstenciones del resto.

En mi toma de posesión dije que es cronista de Pravia el que la cuente, el que la cante, el que la pinte, el que la siembre, el que la interprete y difunda, el que la edifique, el que la rehabilite y el que la invente, que Pravia es lo que fue, lo que pudo ser, lo que queramos que haya sido y lo que nos gustaría que fuera.

¿Hubo cronistas en Pravia?

Oficiales no. Es un referente Antonio de Bances y Valdés por Noticias Históricas del Concejo de Pravia, de 1806; Manuel López de la Torre, alcalde de 1968 a 1979, cronista in pectore, dejó huella en su sección de la Hoja Parroquial, "Algo más para la historia de Pravia"; Fernando Inclán, José Antonio Martínez, Carlos Romero, Manuel Ruiz de Bucesta... Es cronista quien quiera, sea bienvenido, y no tiene menos ventajas que el oficial, por lo que diré a continuación.

¿Por qué se ignora a un cronista?

Ejercí mi amor por Pravia con apoyo popular e institucional desde antes de mi nombramiento, y luego cumplí con las obligaciones y devociones de mi cargo, gratis et amore, con el apoyo de la concejala Valle Iturrate; asistí a los actos a los que fui invitado, participé en asociaciones, corales, publicaciones, pregones, homenajes, procesiones, etc., hasta hace tres años en que el alcalde actual dejó de atenderme con la excusa de que el nuevo interventor exige algunas formalidades, quizá una partida presupuestaria para el cronista. A raíz de esta puñetería, la corporación me ignora, sea o no pertinente la intervención del interventor; aunque, por mi cuenta, sigo representando a Pravia en otros foros provinciales, nacionales y ultramarinos; este oficial (lo soy de Zapadores) ya tiene una edad y si es mala la muerte peor es el olvido.

¿Cómo proteger al cronista oficial?

Para que intercedieran por mí ante el joven edil praviano (le llevo 42 años), acudí, entre otras personalidades, a su predecesor y mentor, De Luis Solar, a la consejera María Jesús Álvarez, al presidente de los Cronistas de España, Juan Resalt, a Adrián Barbón nada menos, y, hace unos días, al diputado Emilio Pérez Cueva y a nuestro primer alcalde en democracia, Francisco F. Casielles (1979-1991), que, como todos, escuchó la evasiva: "Es un problema con el interventor". Entonces, Casielles me relató esta anécdota que puede iluminarnos:

Cuando murió Pío XII, en octubre de 1958, Franco ordenó que se oficiase un funeral en todos los Ayuntamientos de España; el funeral de Pravia, era alcalde Florentino García de la Noceda, se celebró en la Colegiata, y a la hora de pagar la misa (el párroco no cobraba pero pon incienso, cirios, agua bendita, guardarropa, lavandería, propina para los monaguillos...), Florentino se encontró sin la consignación presupuestaria adecuada, pero motivó al interventor, y este sí, con voluntad de resolver, descubrió un capítulo apenas explotado en lo que iba de año, y ahí consignaron los gastos del funeral, en la partida denominada: "Extinción de animales dañinos".

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