Asturias clama contra el peaje del Huerna con una manifestación de unidad en Oviedo: "Exigimos ya su anulación"

Asturias ofreció este viernes una imagen insólita de unidad para pedir al Gobierno de Pedro Sánchez el fin del peaje de la autopista del Huerna (AP-66), la única vía de alta capacidad que une el Principado con la Meseta y cuya mera existencia cuestiona la Comisión Europea, al considerar irregular su ampliación hasta 2050.

Pasar el peaje cuesta 15,60 euros, el precio más caro de su historia. La posición de Europa y la sensación creciente de un «agravio territorial» desembocaron en la manifestación en Oviedo, a la que acudieron unas 5.000 personas, según cifras de la Policía Nacional. La plaza de la Escandalera, lugar tradicional de otras concentraciones históricas por las conexiones con la Meseta (en 1881, contra el trazado ferroviario de la rampa de Pajares, en 1989, de la plataforma por la Variante), volvió a convertirse en un símbolo de protesta.

EN IMÁGENES: así fue la gran movilización contra el peaje del Huerna en Asturias

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La movilización, considerada un éxito por la Alianza de las Infraestructuras —el ente que aglutina al Gobierno regional, partidos, empresarios, sindicatos y asociaciones— fue absolutamente atípica, con muchos rostros conocidos desfilando por la calle Uría. Prueba de ello fue la presencia de Adrián Barbón, presidente del Principado, manifestándose en contra de una decisión del Gobierno central, donde gobierna su propio partido, el PSOE, que se niega a rescatar el peaje. Agravio: esa fue la palabra más repetida ayer, independientemente del color político, patronal o sindical, durante el recorrido.

«Asturias unida, fin al peaje del Huerna» fue el lema escogido para la pancarta de la cabecera de la manifestación. En la primera línea, sujetando el cartel, se ubicaron los líderes empresariales de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE) y de las cámaras de comercio, además de representantes sindicales, patronales del transporte y asociaciones de usuarios.

Todos ellos, alejados en tantas cosas, desfilaron juntos ayer exigiendo el fin del peaje del Huerna.

En segunda fila, y más desperdigados, se ubicaron los rostros políticos. El Gobierno regional estuvo representado por todos sus consejeros, a excepción de la vicepresidenta Gimena Llamedo, que tenía un compromiso personal. También acudieron Alfredo Canteli, alcalde de Oviedo (PP), y Carmen Moriyón, regidora de Gijón por Foro Asturias.

De los grupos de la oposición al Ejecutivo asturiano en la Junta General únicamente faltó Vox, que, aun pidiendo el fin del peaje, decidió no acudir a la manifestación para no apoyar un acto «propagandístico».

También se vio durante el recorrido a Roberto García Morís, diputado del PSOE en el Congreso, que tendrá que posicionarse en la Cámara sobre varias iniciativas parlamentarias que piden el fin del peaje. Su partido defiende la existencia de la infraestructura a nivel nacional, y el diputado optó por no hacer declaraciones.

Adrián Barbón

Barbón, el más esperado, atendió a los medios antes de iniciar el recorrido. «En mi toma de posesión dije que un gobernante vale lo que vale su palabra, y yo empeño la mía con Asturias. Si dejara de cumplir con ello, si dejara de defender los intereses de Asturias, estaría traicionando la confianza mayoritaria de los cientos de miles de asturianos y asturianas que votaron PSOE en las elecciones autonómicas y me apoyaron como presidente. Y fallaría, además, al pueblo asturiano, al que prometí servir desde la Presidencia», destacó.

«Dicen los de siempre que son cuentos. No, no son cuentos, son cuentas: los millones de euros que hemos tenido que pagar los asturianos y asturianas desde 2021 por decisión de quienes prorrogaron de forma injusta e ilegal este peaje», remarcó Barbón, que pidió a los responsables de «semejante tropelía» que pidiesen perdón por la ampliación del Huerna, en referencia al PP, ya que fue un Gobierno popular —el de José María Aznar y el asturiano Francisco Álvarez-Cascos— el que prorrogó el peaje en el año 2000.

«El dictamen de la Comisión Europea es demoledor, concluyente. Establece su ilegalidad. Al Gobierno se le pidió que diese la cara, y eso está haciendo. Esta manifestación es una muestra de la movilización ciudadana», incidió.

Fue una manifestación atípica, al estar en las primeras filas rostros conocidos de la política asturiana, pero con una imagen potente para enviar a Madrid: la calle Uría repleta de manifestantes reclamando al Gobierno central el fin del peaje. Apenas se vio durante el recorrido ningún símbolo político, al margen de banderas de Asturias. Tampoco hubo cánticos, ni siquiera contra el peaje, y no se mencionó a Óscar Puente, el titular de Transportes, que rechaza el rescate y está abiertamente enfrentado con el Principado.

Los manifestantes empezaron el recorrido a las 17.30 horas desde la estación de Renfe y atravesaron la calle Uría hasta la plaza de la Escandalera. Lo hicieron rápido: en apenas media hora habían llegado, bajo las gaitas de la banda «La Laguna del Torollu», de San Claudio. Viandantes de la calle Uría —muchos de ellos turistas, pero también vecinos de la ciudad— fotografiaban el recorrido con sus teléfonos. Hubo alguna pancarta, contada, contra el PSOE, pero el clima de la manifestación fue de paz.

Lectura del manifiesto

En la plaza de la Escandalera tuvo lugar la lectura del manifiesto, a cargo de la periodista de la TPA Natalia Alonso, elegida por consenso por los miembros de la Alianza por las Infraestructuras.

«Hoy nos reunimos aquí, unidos por una misma causa, por una misma convicción y por una misma exigencia de justicia. Porque Asturias no puede seguir soportando cargas injustas que frenan su desarrollo, penalizan su economía y debilitan su cohesión territorial. Pero hoy tenemos un dictamen claro, firme y contundente», destacó.

«La Comisión Europea, en su resolución de 17 de julio de 2025, ha confirmado lo que Asturias lleva décadas denunciando: que las prórrogas de las autopistas AP-66 y AP-9 fueron contrarias al Derecho de la Unión Europea, y que se vulneraron los principios de igualdad, transparencia y servicio al interés general», recalcó la periodista, que añadió que «durante décadas, miles de asturianos y asturianas hemos pagado más por desplazarnos, por trabajar, por estudiar, por vivir conectados con el resto del país». Alonso aseguró que «ese coste injusto ha limitado nuestra competitividad, ha restado oportunidades y ha erosionado la igualdad territorial que nos corresponde», y añadió que «la Alianza por las Infraestructuras del Estado que Asturias necesita asume un compromiso firme con toda la sociedad asturiana: seguir adelante hasta lograr la supresión definitiva del peaje del Huerna».

El manifiesto finalizó con una frase contundente: «Que este acto sea un punto de unión. Que sea el inicio de una nueva etapa. Y que desde hoy, todos juntos, proclamemos con una sola voz: ¡Asturias unida, fin al peaje del Huerna!», reiteró Alonso. Tras la lectura, los asistentes cantaron juntos el himno de Asturias y pidieron, una vez más, el fin del peaje del Huerna.

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