Oviedo para vivir: el PSOE urge políticas para atajar el problema de la vivienda

Oviedo vive una paradoja difícil de aceptar: mientras cientos de jóvenes, estudiantes, familias y personas mayores buscan desesperadamente una vivienda adecuada y asequible, en nuestra ciudad hay más de 20.000 pisos vacíos (el 16% del total); más de 2.000, en estado ruinoso o muy deteriorado, y los alojamientos turísticos superan ya las 6.600 plazas. Tener un parque tan amplio de pisos sin uso o destinados a usos temporales en una ciudad donde cada vez resulta más difícil alquilar o comprar es, socialmente, inaceptable.

El problema no se distribuye de forma uniforme. En el centro urbano la situación es especialmente preocupante: el centro concentra 2.212 viviendas vacías, seguido de Pumarín (1.907), Vallobín (1.306) y Ventanielles (1.289). En el Antiguo, la oferta de viviendas y alojamientos turísticos equivale al 43 % de la población residente, y en el entorno de Uría, al 21,2%. El problema no es la falta de oferta, sino el desequilibrio urbano y la falta de gestión municipal.

A esta situación se suma la presión creciente de los precios. El alquiler medio en Oviedo ronda ya los 866 euros al mes, con un coste de 10,3 €/m², y el precio de venta de la vivienda usada supera los 2.000 €/m², tras subir un 17% en el último año. En la última década, el alquiler medio en Asturias se ha encarecido un 80%, muy por encima del crecimiento de los salarios. Según el Informe sobre el Estado de la Pobreza en Asturias, el porcentaje de personas con retrasos en los pagos de su vivienda casi se ha duplicado desde 2008, del 3,5% al 8,2%.

Frente a esta realidad, desde el Grupo Municipal Socialista defendemos que el Ayuntamiento debe actuar con una política de vivienda valiente, centrada en las personas. No podemos resignarnos a que Oviedo sea un lugar donde solo quienes más tienen puedan quedarse a vivir.

Por eso proponemos medidas concretas. En primer lugar, movilizar la vivienda vacía. No tiene sentido tener miles de pisos cerrados. Planteamos crear una agencia municipal de vivienda, en coordinación con el Principado, que ofrezca ventajas y garantías a los propietarios que cedan sus pisos a un parque público de alquiler asequible.

En gran parte de Oviedo los gastos de vivienda suponen un esfuerzo excesivo, lo que justifica la declaración de zonas tensionadas. En barrios como La Tenderina se destina el 43% de la renta al alquiler y suministros; en Santullano-Ventanielles-Rubín, el 42 %, y en Santo Domingo-Otero, el 37 %. Las zonas tensionadas han sido eficaces para contener el precio del alquiler en ciudades como Barcelona o A Coruña, pero en Oviedo, Canteli se niega.

También proponemos rehabilitar el parque envejecido. Más de 2.000 viviendas están en mal estado o en ruina. Necesitamos un plan integral que combine ayudas a la eficiencia energética, la accesibilidad y la mejora del entorno. Actuar sobre barrios como El Antiguo, Pumarín, o Ventanielles es recuperar espacios para vivir y revitalizar la vida de barrio. Existen importantes ayudas europeas para ello.

Otra prioridad es aumentar el parque público de vivienda. Oviedo cuenta con una oferta pública casi nula, después de décadas de políticas de la derecha. Queremos usar los aprovechamientos municipales en nuevos desarrollos para generar vivienda en alquiler y promover la adquisición y rehabilitación de inmuebles, especialmente en El Antiguo, para incorporarlos a ese parque público. Es clave también acelerar el convenio de La Vega, permutar con Defensa parte de los aprovechamientos, reducir la presión edificatoria en los terrenos de la antigua fábrica de armas y poner a disposición del Estado suelo para 600 viviendas públicas en la zona oeste.

Y no podemos olvidar las viviendas turísticas, que han crecido un 75 % en los últimos años. Hay que establecer límites en las zonas saturadas y garantizar que cumplan las mismas condiciones de calidad, convivencia y fiscalidad que el resto del mercado.

Oviedo tiene la capacidad y los recursos para hacerlo: suelo, edificios rehabilitables, instrumentos urbanísticos y financiación europea. Lo que hace falta es voluntad política. Desde el PSOE de Oviedo queremos que nuestra ciudad vuelva a ser un lugar donde vivir no sea un lujo, sino un derecho, con políticas basadas en el diálogo, la planificación y la justicia social: recuperando viviendas vacías, rehabilitando barrios y garantizando que todas las personas puedan encontrar un hogar en la ciudad que quieren.