Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Sesión de clausura de las XII Jornadas “La Asturias que funciona”

Aniversario de la Facultad de Economía de Oviedo: “Cincuenta años enseñando a escribir futuros”

Los alumnos de la primera promoción destacan que los graduados "han dado un impulso muy fuerte a la economía asturiana” y que el alto nivel académico de entonces “nos permitió incorporarnos muy rápidamente al mercado laboral”

Aniversario de la Facultad de Economía de Oviedo: “Cincuenta años enseñando a escribir futuros”

VÍDEO: Amor Domínguez/ FOTO: Irma Collín

Pablo Álvarez

Pablo Álvarez

Oviedo

La Facultad de Economía y Empresa de Oviedo ha celebrado hoy su medio siglo de actividad subrayando un lema que sintetiza una de sus principales contribuciones: “Cincuenta años enseñando a escribir futuros”.

Esta idea ha sido ha sido lanzada por Marina Estrada Muñiz, estudiante de Derecho y ADE y ganadora del VII Concurso de Discursos de la Facultad; y en ella ha abundado la actual decana, Carmen Benavides, quien calificó al centro universitario que comenzó su andadura en 1975 como “una Facultad grande, dinámica, innovadora, regional e internacional”.

La celebración de la efeméride ha tenido como marco la sesión de clausura de las Jornadas “La Asturias que funciona”, impulsadas por duodécimo año por LA NUEVA ESPAÑA y la Universidad de Oviedo, con el patrocinio de Unicaja, la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), la Cámara de Comercio de Oviedo y el Ayuntamiento de Siero.

Celebrada en el Aula Magna de la Facultad emplazada en el campus del Cristo, y con una nutrida presencia de estudiantes y profesores, además de algunos antiguos alumnos, la conmemoración de las cinco décadas de trayectoria ha estado protagonizada por Manuel Lafuente y Trinidad Vega, alumnos en el curso 1975-76 de la entonces denominada Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales, y Alicia González e Ignacio Caamaño, estudiantes de la Facultad de Economía y Empresa en el presente curso 2025-26. Asimismo, han intervenido los ganadores del Concurso de Discursos: la ya citada Marina Estrada Muñiz y, como segundo clasificado, Pelayo Cases López.

Graduados polivalentes

“Muchos licenciados en esta Facultad han dado un impulso muy fuerte a la economía asturiana”, ha subrayado Manuel Lafuente, profesor a lo largo de 40 años. Puso fin a su etapa docente hace 16 años, y ahora analiza el panorama desde la perspectiva que le ofrece la visión de conjunto: “Quizá ha decaído el nivel de exigencia, pero sigue habiendo estudiantes con mucho talento y preparando nuevos tipos de capacidades”. A juicio del profesor Lafuente, un graduado en Economía “está muy capacitado para trabajar en mil sitios y también para aplicar lo aprendido a su propia vida”. Son estudios, concluyó, que “generan personas con capacidad para casi todo”.

Por su parte, Trinidad Vega ha explicado que su intención inicial era estudiar Ciencias Exactas, pero desechó esta idea porque a mediados de los años 70 del siglo pasado a esta titulación se le veían pocas salidas y, en cambio, Económicas ofrecía muchas. Esta premisa la animó a trasladarse de su León natal a Asturias. En la Facultad de nueva creación se encontró “un nivel académico muy bueno” y “un grupo de profesores que nos dieron muy buena formación”, lo cual “nos permitió incorporarnos muy rápidamente al mercado laboral”.

Como recomendaciones para los jóvenes que se preparan en la Facultad de Economía y Empresa, Manuel Lafuente ha enumerado “ser vosotros mismos, mirar hacia delante, no tener miedo, manifestar lo que pensáis y creéis, y ser solidarios con los demás, porque la individualidad en este mundo sirve de muy poco”. Entre tanto, Trinidad Vega ha puesto el acento en "el sentido crítico, no tener miedo, no perder la curiosidad y no dejar de disfrutar de la fiesta, como acaba de decir durante su visita a Asturias el filósofo Byung Chul Han”.

La visión de las nuevas generaciones

Hace 50 años, Asturias era una región muy industrializada que reclamaba especialistas en economía, finanzas y gestión con talento y buena formación. Y eso mismo necesita ahora el Principado aunque el contexto sea distinto.Lo que más valoro de la Facultad son las pequeñas habilidades que te da. Al inicio quizá no lo notas, pero después ves su importancia en la vida diaria”, ha destacado Alicia González, alumna del grado de Economía. Su compañero Ignacio Caamaño, del grado de Administración y Dirección de Empresas (ADE), ha manifestado un especial interés por el emprendimiento, la psicología y la dirección de empresas. “Me encanta todo lo que tiene que con la creación de negocios. Y me gustaría trabajar en Asturias, después adquirir experiencia en el exterior y a continuación volver”.

En el acto ha intervenido Lucía Avella Camarero, directora del Departamento de Administración de Empresas. Fue alumna de la Facultad entre 1987 y 1992. La profesora Avella ha enfatizado el nivel de las sesiones de “La Asturias que funciona”. A su juicio, “estas jornadas han permitido ofrecer una doble visión, aportada por empresas asturianas de éxito y por profesionales formados en estas aulas y que llevan el espíritu de la Facultad”. La directora del departamento ha hecho hincapié en la “necesaria colaboración entre la Universidad y las empresas”, y a los alumnos les deseó “que podáis ocupar cargos de responsabilidad”.

Estudiantes formados e informados

El acto ha sido conducido con fluidez por Amor Domínguez, periodista de LA NUEVA ESPAÑA. En nombre de este periódico ha hablado el gerente, Marcos Alonso Álvarez, quien ha recomendado a los alumnos que “a vuestra buena formación añadáis una buena información”. Marcos Alonso ha indicado que LA NUEVA ESPAÑA es “el medio de comunicación con más audiencia de Asturias”, y ha precisado que entre sus lectores “hay mucha gente joven y con estudios universitarios”.

Por parte de los ganadores del VII Concurso de Discursos de la Facultad de Economía, Pelayo Cases ha realizado una nítida reivindicación de los estudios de Economía y Derecho, “la mejor conjunción posible”, y Marina Estrada ha remarcado las ventajas que ofrece “saber comunicar, crear una idea y convertirla en acción”.

Desde la butacas del Aula Magna seguía el acto Tomás Felipe Álvarez Rodríguez, alumno de la primera hora, quien a preguntas de este periódico ha evocado lo vivido hace medio siglo: “El recuerdo que tengo de aquella época es, sobre todo, la ilusión que pusimos todos: profesores, decanato, rectorado de la Universidad, alumnos… Había pocos medios, pero el entusiasmo ante algo nuevo era grande”.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents