El presidente del Principado, Adrián Barbón, defendió ayer el trabajo del Comisionado para el Reto Demográfico, Jaime Izquierdo, y afeó las críticas vertidas por varios grupos en la Junta hacia la labor que desempeña. “Querer culpar a una persona de un problema que en Asturias, al igual que en el resto del Noroeste, se lleva dando desde hace mucho, me parece que está, cuanto menos, fuera de lugar”, espetó Barbón en una visita a Lugones.

“Entiendo que la oposición quiera hacer oposición”, señaló el presidente, quien insistió en que la figura del Comisionado es un “órgano de asesoramiento unipersonal, sin estructura administrativa ni equipo técnico”

Barbón indicó que “mienten quienes dicen que el problema demográfico se puede solucionar en una legislatura”, porque “es necesario aplicar políticas y medidas que tendrán resultados a 15 o 20 años; el despoblamiento no es una maldición bíblica y se trabaja para revertir la situación”.

El presidente del Principado también volvió a destacar que en 2020 Asturias recibió por primera vez más gente de la que se fue a vivir fuera y eso es “un dato muy importante” porque se está revirtiendo una tendencia que, en todo caso, “no es ajena a otras regiones ni a otros países”. En el caso, por ejemplo, de “comunidades tan dinámicas como Madrid o el País Vasco también se está perdiendo población”, subrayó.