La Junta General del Principado ha reformado su plan de contingencia contra el coronavirus con arreglo a las últimas disposiciones de las autoridades sanitarias, pero ha acordado mantener su exigencia "en las sesiones de Pleno y Comisiones, salvo para el orador", así como "en las demás reuniones, siempre que no se pueda garantizar una distancia interpersonal mínima de metro y medio", entre otras. La modificación de las condiciones elimina las restricciones de aforo y establece, con esas excepciones, la retirada de la obligatoriedad de las mascarillas siempre que se garantice la distancia, aunque de acuerdo con lo dispuesto con la autoridad sanitaria su utilización se considera "altamente recomendable"