El 8 de octubre de 2015 tuve la oportunidad de que su diario publicara una carta mía, cosa que les agradecí, en la que me quejaba amargamente de la sanidad; me acababan de dar una cita para traumatología con una demora de 8 meses.

Como mis problemas, lejos de solucionarse, siguen en su evolución, y no precisamente positiva para mí, en la actualidad, y pasado un año y medio, mi médico de familia, buscando mejorar mi estado, decide mandarme a que valore un neurocirujano en el HUCA alguna alternativa de quirófano.

Siguiendo el procedimiento, el centro de salud al que pertenezco me remite a mi domicilio una carta en la que se indica que debo acudir al HUCA el día 21 de marzo de 2018.

Sí, señores, han leído ustedes bien, me dan cita para 2018, es decir, más de un año de espera para una consulta.

Y yo que me quejaba de los 8 meses de la cita anterior, pobre infeliz e inocente de mí.

Señores politicuchos de tres al cuarto, vividores a cuenta de los impuestos de los ciudadanos, personajillos sin formación alguna más allá que la de haber pertenecido al equipo pegacarteles de un partido político logrando ascensos a costa de medrar y manipular; sí, ustedes, señores acomodados en la poltrona y viviendo de la sopa boba, ¿qué basura de sanidad tenemos en Asturias?

Si no estoy equivocado, en esta comunidad los señores del puño y la rosa o, más bien, los señores del capullo en el puño mandan desde hace años, sus mítines y algaradas en defensa de la sanidad pública, la educación y demás cacareos vanos convencen a los votantes para mantenerse en el cargo, viviendo a cuerpo de rey y llevándonos por el camino de la ruina.

Sí, ustedes, señores del PSOE (Partido Socialista Obrero Español), con el presidente Javier a la cabeza, ¿qué estáis haciendo con Asturias?

Pónganse a trabajar por el sueldo que les pagamos y resuelvan de una vez esta mierda de sanidad que tenemos. Si no son capaces, algo que han demostrado, y a las pruebas me remito, váyanse para casa, pero antes renuncien a sus jubilaciones y quédense con las que tenemos el resto de mortales.

Por cierto, ignoro si se trata de una coincidencia macabra: las sentencias judiciales son de "un año y un día" y esta citación para Neurocirugía es de "un año y un día". ¿Será una premonición?

Un cordial saludo.

Un penitente que está harto de tanto mierdoso.