M. RIERA

El alcalde de Avilés, el socialista Santiago Rodríguez Vega, admitió ayer que ve una solución «difícil» al enfrentamiento de Lonja Avilés con la cofradía de pescadores después de que los primeros hayan dejado claro que sólo la dimisión del patrón mayor, Gregorio López, les haría regresar a vender en la rula avilesina.

Rodríguez Vega aseguró que habla prácticamente a diario con ambas partes, incluido el director de Pesca, Alberto Vizcaíno -«estoy seguro de que quiere el bien de la pesca de Avilés»- y que trabaja para poner fin a la crisis: «Hablo con todo el mundo». El Alcalde reconoció, también, que está preocupado por la situación que atraviesa el sector pesquero: «Lo importante en todo este asunto es la pesca de Avilés, ¿cómo no me va a preocupar? Aquí lo que hace falta es que hablen entre ellos». No obstante, el regidor avilesino prefirió no valorar el rechazo automático de Lonja Avilés a volver a la rula a cambio de la retirada de las sanciones. Este planteamiento fue precisamente el defendido por Rodríguez Vega semanas atrás, cuando los armadores de la sociedad optaron por irse a Gijón y Galicia.

Lo que sí quiso criticar el Alcalde fue la actitud del PP, a los que reprochó «hacer ruedas de prensa para hablar del conflicto. Así no ayudan a nada».

Horas antes, los populares dieron una rueda de prensa para hablar de la crisis y despacharse contra dirigentes de la Administración socialista (el presidente del Puerto, Manuel Ponga, y Alberto Vizcaíno), a los que volvieron a acusar de haber originado el conflicto pesquero.

El portavoz popular y candidato, Manuel Peña, pidió el cese de ambos al presidente Principado, Vicente Álvarez Areces. «Tiene que depurar responsabilidades, después de la situación que han originado», dijo. El edil Constantino Álvarez hizo un llamamiento a la «sensatez» a los armadores de Lonja Avilés y les invitó a revisar las auditorías de la cofradía, que los propios populares conocieron ayer: «Tienen que tener criterio. Ellos eran parte de la entidad hasta hace poco y les valían las cuentas».

El primer teniente de alcalde y portavoz de IU, Fernando Díaz Rañón, apuesta por buscar una solución rápida que, dijo, pasa «por la adjudicación de la nueva lonja de forma integral de una vez». Rañón insistió en que la cofradía «es la única al día de hoy que garantiza la continuidad del empleo».