M. MANCISIDOR

«Agua que has de beber no la dejes correr», sentenció Faustino Villabrille, sacerdote y cooperante con poblaciones indígenas de Alta Verapaz (Guatemala), el jueves pasado, durante un acto del Club LA NUEVA ESPAÑA en Avilés enmarcado en la VI Semana solidaria de Llaranes. Villabrille explicó los proyectos que tiene su comunidad en una tierra donde el agua se recoge en bidones y los manantiales más próximos están a kilómetros. A su lado estuvieron la concejala de Bienestar Social del Ayuntamiento de Avilés, Aida Rodríguez, y la directora de Cáritas de Llaranes, Nieves Álvarez Mariño. Los tres hablaron de solidaridad internacional, de cooperación con los países más desfavorecidos y del presente y el futuro de unas tierras que carecen del primer alimento: el agua.

Villabrille destacó que cada ocho segundos un niño se muere de sed en el mundo y explicó cómo viven los menores de Alta Verapaz, municipio para el que Cáritas de Llaranes está recaudando fondos durante la Semana solidaria con objeto de construir un sistema de recogida eficaz de agua pluvial. «En Alta Verapaz he visto a niñas levantarse a las 4 de la madrugada para ir a por agua a tierras a cuatro horas de distancia y volver con bidones a las espalda», dijo el sacerdote, quien no perdió la oportunidad de criticar a las grandes potencias mundiales, que, a su juicio, dañan la Naturaleza.

«Cada quince minutos se talan hectáreas del Amazonas, no existen cereales porque hay grandes plantaciones de biodiésel y en un futuro próximo el agua será el oro azul por el que se pelearán las comunidades, un producto más importante que el petróleo», señaló Faustino Villabrille, quien instó a los asistentes del Club LA NUEVA ESPAÑA a analizar la situación de los países más desfavorecidos con «conciencia crítica».

Aida Rodríguez acudió al Club LA NUEVA ESPAÑA en calidad de concejala, si bien no pudo evitar retroceder en el tiempo, a sus diez años como cooperante en Lima y Manila. «Este año me ha costado bastante adaptarme a una nueva situación, hubo momentos, por ejemplo, en colegios, en los que me costaba aceptar ciertas solicitudes porque comparaba los colegios de Avilés con aquéllos de los países que visité», afirmó.

«El Ayuntamiento de Avilés tiene el propósito de destinar el 0,7 por ciento de sus ingresos a proyectos solidarios, porcentaje que aumentará en unos años. Creo que los ayuntamientos tenemos un papel importante en cooperación, pero no sólo de tipo financiero, sino en el desarrollo local de las comunidades desfavorecidas», subrayó la edil.

La concejala de Bienestar Social señaló, a su vez, que la lacra de los países más desfavorecidos es la corrupción -«la ayuda no siempre llega a las manos que debe, por lo que reivindico la figura de profesionales de la cooperación al desarrollo», dijo- y planteó la necesidad de crear alianzas internacionales. Del agua, motivo que impulsa la VI Semana solidaria de Llaranes, coincidió con Villabrille: «Es el petróleo del futuro», dijo Rodríguez. La concejala intercaló su intervención con imágenes de su pasado.

Por su parte, la responsable de Cáritas de Llaranes dio a conocer el programa de actos de la VI Semana solidaria de Llaranes, que comenzó el pasado lunes y se clausura mañana. Nieves Álvarez destacó que uno de los objetivos del evento es favorecer el acceso al agua potable a 471 familias indígenas, así como promover la concienciación y la lucha por el acceso al agua como un derecho humano.

Por ese motivo, Llaranes trabaja desde el lunes por la solidaridad. Las actividades continuarán hoy, sábado, y estarán dirigidas al deporte infantil. Los niños -en años anteriores participaron más de doscientos- podrán participar en un campeonato de baloncesto infantil mixto 3x3, en el tercer maratón infantil de bolos, fútbol 7 y rugby. Las competiciones solidarias tendrán lugar en las canchas de Llaranes Viejo, la bolera y el campo de Santa Bárbara. Y mañana, domingo, día grande de la VI Semana solidaria, habrá actos de 11 de la mañana a 10 de la noche. Los organizadores colocarán una mesa con material informativo sobre Guatemala y se montará un mercadillo con objetos de artesanía, además de exposiciones, una misa al mediodía en la plaza de Llaranes, actuaciones musicales, un acto de entrega de premios del concurso de pintura sobre el agua y comida popular.