F. L. J.

El Puerto de Avilés está a punto de hacer caer un nuevo récord en complicidad con la empresa de calderería Idesa, que tiene su taller en el parque empresarial de la ría. En las próximas horas se embarcará en el buque especializado en mercancías voluminosas «Jumbo Havelin» una columna de destilación de 780 toneladas (50 metros de largo por 15 de ancho) que se convertirá en la mayor nunca exportada desde Avilés.

El destino de semejante alarde de ingeniería es el puerto canadiense de Montreal, desde donde la pieza se llevará por carretera hasta una refinería de Estados Unidos para su ensamblaje definitivo. Con este encargo, IDESA rompe una nueva frontera ya que nunca antes había atendido un pedido tan exigente en materia de tamaño. No obstante, desde este taller especializado en calderería pesada aseguraron ayer que ni mucho menos han tocado techo y que están en condiciones de asumir la ejecución de proyectos aún más complejos.

El transporte de la pieza desde la nave de Idesa hasta la dársena de San Agustín, donde mañana será izada al barco que la llevará a América, se realizará a partir de las 14.00 horas de esta tarde con ayuda de camiones y plataformas especiales de la empresa Mamut.

Por otra parte, la Autoridad Portuaria de Avilés ha sacado a liciatación, con un presupuesto de 513.890 euros, la construcción del nuevo puesto de control de acceso a los muelles, con un diseño inspirado en la chimenea de un gran trasatlántico. La obra tiene un plazo de cinco meses.