El barrio de Miranda sigue de fiesta, a pesar del «empacho» de las jornadas de pulpo y mejillón y la arrozada asturiana organizada el sábado. Como no podía ser menos, ayer también se pusieron las botas con una gran costillada amenizada por dos orquestas. Además, por la mañana, tuvo lugar el V Encuentro nacional de petanca, una diana floreada y la misa con procesión. También pudieron disfrutar de un concierto de la banda municipal.