Amaya P. GIÓN

La jueza titular de la sala de lo Penal número 2 de Avilés ha condenado a seis años y medio de cárcel a «El Solitario» asturiano, Manuel Ángel Á. R., por el robo de un banco en Las Vegas (Corvera) en abril de 2008. La magistrada considera al delincuente avilesino responsable de un delito de robo con intimidación con la circunstancia agravante de uso de disfraz y de otro de tenencia ilícita de armas. Además, condena al otro imputado en el atraco, M. Á. G. R., a dos años de prisión por el delito de robo, si bien este último no tendrá que ingresar en la cárcel al no contar con antecedentes penales. El fallo no es firme y las partes pueden recurrirlo ante la Audiencia Provincial.

La magistrada no ha necesitado ni una semana para resolver la autoría del atraco, que se registró el 18 de abril de 2008 en una sucursal del Banco Herrero. «El Solitario» avilesino insistió en la vista, que se celebró el pasado día 21, en que no existen pruebas que lo impliquen en el robo del banco corverano y que las fuerzas de seguridad lo convierten en «sospechoso de cada delito que se comete». Es más, en su derecho a la última palabra hizo referencia a una escena de la célebre película «Casablanca»: «¿A quien vamos a detener? A los habituales, a los de siempre».

Para la magistrada, en cambio, las pruebas confirman que el hombre disfrazado con peluquín, bigote y perilla al que grabaron las cámaras de seguridad el día del atraco es «El Solitario» asturiano. Así, y según recoge la sentencia, Manuel Ángel Á. R. y M. Á. G. R. (cuyos intereses defienden José Manuel Fernández y Sonia Arévalo Piriz) se desplazaron el día de los hechos en una furgoneta a la localidad de Las Vegas. Mientras el segundo esperaba en el vehículo, el conocido delincuente avilesino se dirigió a la sucursal ataviado con peluquín, perilla y bigotes postizos y de color rubio. Una vez en el interior del banco, según consta en el capítulo de hechos probados, el imputado sacó un revólver que llevaba escondido en el interior de una carpeta de mano negra con la que intimidó a los empleados al grito de «esto es un atraco». El empleado que se encontraba en el mostrador le entregó 525 euros en billetes de cinco que el imputado guardó en la misma carpeta. Tras ordenar a los trabajadores que se metieran en un despacho, Manuel Ángel Á. R. salió del banco y huyó del lugar en la furgoneta junto al otro imputado. Al día siguiente M. Á. G. R. trasladó al atracador a Bilbao, donde se separaron.

Las fuerzas de seguridad detuvieron a «El Solitario» asturiano el 30 de mayo de 2008 en su domicilio de Punta Umbría (Huelva). En el registro de la vivienda hallaron un revólver, guantes de látex, una placa de policía, una peluca rubia, perilla y bigotes del mismo color, entre otros utensilios, que la juez relaciona con los objetos utilizados en el atraco del Banco Herrero de Las Vegas. El imputado aseguró en el juicio que es peluquero profesional y que por eso había pelucas en su casa y que el revólver incautado lo compró semanas antes de la detención para quitarse la vida ante el temor a una nueva detención.

Y es que al delincuente avilesino, de 68 años, le atribuyen unos 23 robos cometidos durante las tres últimas décadas. Permanece en Villabona desde junio de 2008, tras la detención de Huelva. En 1976 fue encarcelado por primera vez y aunque le denominan «El Solitario» asturiano por su forma de actuar, similar a la del atracador Jaime Giménez Arbe, suele utilizar cómplices en sus atracos. Su abogado ya dijo el mismo día del juicio que recurriría el fallo en caso de condena.