Myriam MANCISIDOR

«Papi, lo vas a hacer muy bien, estaremos animándote. Para nosotros ya eres un campeón. Te queremos mucho». Éste es el mensaje de aliento que pudo leer Anthony Hecht en su página web poco antes de calzarse las zapatillas para participar en la populosa maratón de Madrid. Las palabras de cariño eran de su familia. Y es que las zancadas de Hecht por la capital tenían un único objetivo: recaudar fondos para impulsar la investigación de artritis idiopática juvenil de forma sistémica. A su hija Ilana -la mayor de tres retoños- le diagnosticaron esta patología crónica y autoinmune con veinte meses.

Durante un año, la pequeña, natural de Salinas (Castrillón), permaneció postrada en un sillón: Ilana Hecht luchaba contra el dolor. La enfermedad, en su caso, se tradujo en estados febriles, exantemas (erupciones en la piel) y daño e inflamación de las articulaciones así como del bazo, el hígado y los ganglios linfáticos. Ilana Hecht recorrió muchos hospitales y probó distintos fármacos.

Desde hace meses cumple con un tratamiento novedoso y su salud ha mejorado. La pequeña ha vuelto a sonreír. Sus madres, Anthony Hecht y Cristina Suárez, quieren no obstante que se sigan investigando las causas y la posible cura de la artritis reumatoide. De ahí que hayan decidido recaudar fondos para la ciencia.

Hecht y Suárez han abierto una página web (http://www.justgiving.com/anthonyhecht) donde ya han reunido 7.927 libras que destinarán a la asociación Arthritis Research Campaign. En su día anunciaron además que Anthony Hecht correría la maratón del 25 de abril de Madrid también con el mismo fin: obtener fondos. Dicho y hecho.

El padre de Ilana cumplió lo prometido y el pasado domingo dio zancadas solidarias durante tres horas, treinta y nueve minutos y cincuenta y ocho segundos. El mercurio marcaba entonces 27 grados centígrados en Madrid. «Ha sido una experiencia única pero probablemente no irrepetible ya que volverá a correr», sentenció ayer Cristina Suárez, quien agradeció el apoyo de todas las personas que han colaborado aportando fondos a través de la página web. Saben que cualquier iniciativa a favor de la investigación de la artritis idiopática juvenil no sólo beneficiará a su hija, hay muchos niños en la misma situación que Ilana.

Anthony Hecht y Cristina Suárez tienen dos hijos más, Sophia y Noah, de 7 y 5 años, respectivamente. A Ilana le diagnosticaron la enfermedad cuando tenía un año y medio. Son conscientes, desde entonces, que la salud de su hija depende de los progresos que se realicen en los laboratorios. Por este motivo han decidido iniciar una carrera para impulsar la investigación. En la meta está el bienestar de Ilana Hecht.