Teresa CEMBRANOS

El PP no pudo ser peor agorero con el futuro de Avilés tras analizar las medidas que aplicará el Gobierno de Rodríguez Zapatero para intentar reducir el déficit público. Así, Carmen Rodríguez Maniega, diputada nacional de los populares, afirmó que Avilés es «el paradigma de ciudad más perjudicada» por el recorte de inversiones sociales e infraestructuras que propone el presidente del Gobierno por su alto índice de envejecimiento y su apuesta por el sector terciario, en detrimento de la industria.

«El sector servicios va a ser el más afectado por la bajada de los sueldos a los funcionarios y el recorte de las pensiones ya que se va a retrotraer el consumo. Además, a partir del 1 de junio va a subir en dos puntos el IVA. El escenario de la ciudad es el peor posible», apuntó Rodríguez Maniega.

Y es que tanto la diputada como el presidente del PP de Avilés, Joaquín Aréstegui, aseguraron que un tercio de la población avilesina es pensionista y hay un 15 por ciento de funcionarios trabajando en Avilés. «Estamos seguros de que aumentará el paro, sobre todo por la pérdida del poder adquisitivo y la bajada del consumo», añadió Rodríguez Maniega, que también criticó las medidas que afectarán a la ley de dependencia. «El envejecimiento es cada vez mayor, el cobro de las ayudas no tendrán carácter retroactivo y tardarán seis meses en valorar una situación», afirmó.

Aréstegui, por su parte, tachó de indignante que los socialistas hayan negado, hasta ahora, la crisis. «De repente, en una semana y ante el shock más importante, ponen en marcha unas medidas que tendrán un impacto brutal en los ciudadanos. Lo de Zapatero no son recortes, son amputaciones, ya que hace el mayor recorte social de la historia, se salta la ley de Pensiones y ajusta la ley de Dependencia», aseveró el presidente local. Aréstegui previó también que las medidas también afectarán a las grandes empresas, como Saint-Gobain o Arcelor, ya que «verán reducida su actividad».

El dirigente popular aseguró también que el «decretazo» de Zapatero será el fin para las grandes infraestructuras de Avilés, como la barrera ferroviaria o la ronda norte, ya que «no hay dinero». «También quedará en suspenso el Centro Cultural Oscar Niemeyer. Si hay un proceso importante de recortes en el Principado, ¿qué pasará con los equipamientos?, ya que no están presupuestados», denunció. Aréstegui, por esos motivos, reclamó a los socialistas que «sean sinceros» y no sigan diciendo que la crisis «no afectará a Avilés».