-¿Los trabajadores de los planes de empleo ocupan puestos de estructura?

-No los ocupan. Una de las razones que planteamos al juez para decir que no se pueden reincorporar es que no tenemos puestos vacantes para ellos. No contratamos a ese personal porque tengamos necesidad, los contratamos para que se formasen.

-Pero Avilés tiene un problema singular: la cláusula de la que hablamos antes.

-Es verdad que es un problema que sólo tiene este Ayuntamiento, pero eso no va a impedir que manifestemos que no podemos tener esos trabajadores, porque no los necesitamos. El Ayuntamiento puede ampliar su plantilla si un trabajador de los que tiene es despedido y el despido se declara improcedente y, en consecuencia, él decide volver... Es lógico, puede hacerlo porque tiene su puesto. Alguien que no estaba en el Ayuntamiento, a quien no se le contrató para trabajar aquí, acabará siendo despedido. Nos costará dinero, pero no va a volver a trabajar aquí. Eso está claro.

-Desde 2007 no hay una oferta pública de empleo.

-Esto hay que consensuarlo con los sindicatos. Fueron un montón de reuniones para aclarar el proceso y acordamos que primero había que consolidar plazas... Cuando estábamos casi de acuerdo vino a unas reuniones el asesor del sindicato USO y planteó la posibilidad de impugnar esas bases consensuadas. Dijimos que no tenía sentido presentar unas bases que fueran impugnables. Por eso nos reunimos de nuevo, decidimos hacer los estudios jurídicos pertinentes... y así estuvimos hasta diciembre. Hoy tenemos claro el proceso para la consolidación del empleo. Daremos los pasos a partir de ahora para convocar los exámenes. Todo lleva un procedimiento... Luego de la consolidación viene la promoción interna y, después, la oposición libre. Tenemos ya la oferta hasta el 2011, que es cuando acaba el convenio. Ahora posiblemente habrá que analizar las consecuencias de lo que el presidente Zapatero presentó esta semana. Lo analizaremos en cuanto se publique el decreto.