Nubledo,

Illán GARCÍA

El PSOE entiende que el gobierno de Corvera está «descontrolado» y que es una «amalgama de contradicciones» después de que el PP -que controla el área de Urbanismo- anunciara que va a presentar alegaciones al Plan General de Ordenación Urbana, que apoyó con sus votos para la aprobación inicial. «El socio de gobierno hará propuestas propias al planeamiento y luego el Alcalde, Luis Belarmino Moro, nos pide a los demás que le apoyemos. ¿Si es incapaz de controlar su gobierno, cómo pretende que los corveranos piensen que puede gobernar con solvencia?», planteó Iván Fernández, portavoz del PSOE local.

La alegación del PP al planeamiento se centra en una simple petición dirigida a los promotores que hagan nuevas edificaciones en el concejo. Los populares entienden que los constructores han de acondicionar la urbanización exterior de los edificios antes de edificar los bloques de pisos. «Como se ha hecho en Avilés con la urbanización de La Magdalena; es algo lógico», puntualizó el portavoz socialista, que indicó además que la alegación que presentarán los populares «no es suya, sino que forma parte de las correciones y sugerencias que realizaron la arquitecta y la ingeniera municipales en un documento de 25 páginas». Los socialistas pidieron además que los dos socios de gobierno «se pongan de acuerdo por el bien del concejo».

Fernández se preguntó también si esas correciones «propuestas por los técnicos municipales» serán incluidas en el planeamiento «ya que son lógicas» o si por el contrario el anuncio del PP es un pulso más entre el concejal de Urbanismo, Luis Solares, y el Alcalde, Luis Belarmino Moro, «que evidencia que cada uno va a lo suyo».

El portavoz de los socialistas corveranos indicó además que si el PP presenta sus alegaciones al Plan General de Ordenación Urbana denota que el documento aprobado en el último Pleno municipal «es malo y necesita correcciones». De esta manera, según los socialistas, «se evidencia una vez más el descontrol de Luis Belarmino Moro, que más que dirigir un gobierno serio parece vivir en el camarote de los hermanos Marx».