Amaya P. GIÓN

Participó en la primera edición de las Jornadas del cómic avilesinas y cada cinco años vuelve a deleitar a los amantes locales de la viñeta. George Pérez, el que es considerado uno de los artistas más influyentes de los cómics de la década de 1980, ha vuelto a cumplir y no ha faltado a su cita cuando se celebran quince años de las jornadas del dibujo y la ilustración. «Llevo 36 años haciendo haciendo cómic porque me encanta, porque es mi pasión y porque es lo que he querido hacer siempre. La pasión es la base fundamental para contar historias. Si alguien quiere dedicarse a la historieta por ganar dinero o para utilizarla como plataforma hacia otra actividad, mejor que lo deje», señaló ayer en Avilés. Pérez considera la pasión un ingrediente básico en la paleta del dibujante y el ciber espacio una auténtica revolución para los autores de cómic. «Internet ha abierto todo un mundo de posibilidades. Cuando empecé, tenías que llevar tus dibujos en una carpeta debajo del brazo y presentarte ante el editor de turno. Ahora los escaneas, los cuelgas en la red y todo el mundo tiene acceso a ellos. Es una gran ventaja», señaló el norteamericano.

Pérez ilustró un sinfín de cómics de Marvel, entre ellos «Los cuatro fantásticos». En las jornadas del cómic de ayer, los fantásticos fueron cinco. Además del lanzador de «Wonder Woman» protagonizaron el programa J. H. Williams III, autor de las ilustraciones de «Promethea» bajo el guión de Alan Moore; el brasileño Ivan Reis, dibujante de «La linterna verde», que tendrá adaptación cinematográfica; el autor de «Loki», el croata Esad Ribic, y el nacional Pere Pérez, que trabaja para la industria estadounidense. Pérez, devoto de «Star Wars», tiene una cuenta pendiente, dibujar a los personajes de la trilogía que le adentró en el mundo del tebeo.

Según J. H. Williams III, para poder vivir del universo del cómic la perseverancia es tan importante como la pasión. «El truco es no desanimarse a pesar de las críticas. Este es un mundo muy competitivo», señaló. George Pérez, además, no tuvo más que palabras de elogio para los organizadores del certamen avilesino: «Sigo viendo en las organizadores la misma pasión que hace quince años. Lo mejor es que el espíritu no ha cambiado», concluyó.