Ante la recepción de las obras de la primera fase de los nuevos muelles portuarios, los medios de comunicación sólo expresan triunfalismos y desarrollismo, sin pararse a pensar en el lamentable efecto medioambiental que supone esta obra.

Desde el Grupu d'Ornitoloxía Mavea, el Colectivo Ecoloxista d'Avilés y otras entidades nos opusimos desde un primer momento a lo que consideramos uno de los mayores desastres ambientales de los últimos años en Avilés. El motivo es que se siguen destruyendo marismas en nuestra ría, cuando la legislación internacional parece que imposibilitaría esto. Sin embargo, como siempre ocurre «poderoso caballero es don Dinero» y donde mandan las previsiones económicas de algunos, desaparece la sensibilidad ambiental.

Y decimos «de algunos» porque esta obra se justificó con los sueños megalómanos de los dirigentes de la Autoridad Portuaria de aquellos años, soñando con unas cifras de futuros tráficos portuarios fantasiosas. Nunca entendimos como el presidente de Puertos del Estado, durante una visita a Avilés, dijo que sólo se construiría la primera fase de estas obras, ya que todo dependía de la evolución de esos tráficos. Pero una vez empezada la crisis, cuando todas las previsiones iniciales se fueron al traste, se financió la segunda fase de las obras (actualmente en ejecución). ¿Quién se hace responsable ahora de esto para pedirle cuentas? ¿Por qué se trabaja tan alegremente con dinero público?

El actual presidente del Puerto afirmó públicamente que no se alcanzarán ni siquiera las cifras de tráficos anteriores a la crisis. Estas declaraciones son muy importantes porque por primera vez un gestor utiliza argumentos racionales y dice lo que muchos pensábamos; por eso afirma que no se hará la tercera fase de las obras.

Pero es que no se debería haber hecho ni la primera fase, ya que no hay previsiones de nuevos tráficos, no hay dinero para equipar los nuevos muelles y encima el estudio de impacto ambiental con el que se aprobaron estas obras era muy deficiente. Nuestras alegaciones a este estudio se pueden ver en los documentos de nuestra web (http://mavea.org/web/). Nos parece alucinante como un anterior presidente del Puerto (que es uno de los responsables de estas obras) sigue actualmente defendiendo que se haga la tercera fase, a pesar de todos los datos que hay en contra. Aunque no nos debería sorprender, ya que ese gestor afirmó que si el problema ambiental de las obras era la marisma ésta se cogía y se «cambiaba de sitio». La ignorancia es muy atrevida, pero no se debería consentir semejante sandez a un cargo político sin exigirle responsabilidades.