E. CAMPO

El informe definitivo de la Intervención General, que ya analizan los partidos de la oposición, viene a ratificar los resultados del estudio provisional de control financiero, y mantiene la reclamación de las subvenciones concedidas por el Principado a la Fundación del Centro Niemeyer. El documento discurre en los mismos términos que el informe provisional, abundando en algunos detalles, pero ciñéndose a la misma argumentación y recomendaciones. Así, el interventor firmante considera adecuado «solicitar los reintegros de las subvenciones concedidas por los incumplimientos puestos de manifiesto en el cuerpo del presente informe y, en particular, el reintegro del exceso de financiación de los ejercicios 2007 y 2008 por importe de 229.730 y 39.169 euros respectivamente». La principal diferencia con el documento original es que se incorporan ya las observaciones respecto a las alegaciones de la Fundación, que rechaza en su práctica totalidad, y determina encargar una auditoría para determinar exactamente qué cantidades deberá devolver la Fundación.

El diputado popular Joaquín Aréstegui afirmó, a la luz del informe, que queda clara la «mala fe» por parte del Gobierno de Francisco Álvarez-Cascos. «La Consejería se enroca con la petición de las subvenciones, porque no dice que no se justifiquen los gastos, sino que no se aporta la documentación, pero es que tampoco se molestaron en ir a consultar los expedientes a las oficinas de la Fundación», aseguró el también presidente del PP avilesino. Aréstegui aseguró además que es «escandaloso» que el Principado hubiera hecho públicas «gravísimas acusaciones de gravísimas irregularidades sin que haya respaldo documental». El dirigente popular preguntó por los «yates en el Caribe» y aseguró que es muy grave que se hubiera «jugado con el prestigio de las personas de forma frívola». «Las gravísimas irregularidades no están en ninguna parte, no se deduce de los informes. Se deduce que existe falta documentación pero eso no es para poner de sinvergüenzas a los gestores», concluyó.

La Fundación del Niemeyer presentó, con fecha 26 de septiembre, las alegaciones pertinentes al informe provisional en el que Intervención consideraba indebidamente justificadas las subvenciones aportadas por el Principado. La consejería de Cultura aportó 500.000 euros los años 2007, 2008 y 2009, y 570.000 en 2010. Sin embargo el consejero de Cultura, Emilio Marcos Vallaure, considera que no se puede valorar la documentación «por el hecho de aportarse como justificantes simples fotocopias, ya que no se puede acreditar su autenticidad e integridad». Y si la conservación de originales en poder de la Fundación se estimaba imprescindible, continúa Vallaure en el informe, «nada impedía a la empresa aportar originales y fotocopias, para que tras el correspondiente cotejo aquellos pudieran ser devueltos el mismo día». De esta actitud deduce el consejero de Cultura «falta de colaboración».

Vallaure, a fin de determinar la cuantía exacta de reintegro, solicitó a la Intervención General una auditoría de las subvenciones y ayudas públicas del Principado al Niemeyer. «Dicha petición encontraría amparo en el vigente plan anual de control financiero permanente y plan anual de auditorías para el ejercicio 2011».

En el informe se asegura, por último, que la Fundación «confunde control financiero permanente», en el que se inscriben las acciones realizadas por Intervención, «con la auditoría pública de subvenciones». Y por todo ello la Consejería manifiesta su conformidad con el informe provisional, comprometiéndose además a elaborar instrucciones internas en materia de justificación de subvenciones en el ámbito de la Consejería de Cultura y Deporte.