Piedras Blancas,
I. MONTES
Las bibliotecas públicas de Piedras Blancas y Salinas contaron el año pasado con más de 40.000 visitantes, una cifra muy similar a la de 2010, según los datos hechos públicos por la concejala de Educación y Cultura de Castrillón, Esther García. Las dos bibliotecas municipales cuentan con un total de 4.000 socios de los que 2.782 son del centro de Piedras Blancas y el resto de Salinas. La biblioteca de Salinas captó en 2011 116 nuevos socios, 72 adultos y 44 infantiles. Una cifra inferior a la de 2010, según García.
El fondo de las bibliotecas superan los 21.000 libros, las 3.000 grabaciones sonoras, 800 videograbaciones y casi 200 recursos electrónicos. El sistema de préstamo de libros se mejoró en los últimos años al estar en red las dos salas. Los usuarios pueden acudir a buscar un libro a Piedras Blancas y si no lo hay se lo pueden solicitar en salinas e incluso en otras bibliotecas públicas de la comarca avilesina, explicó la concejala.
Además de los servicios tradicionales, en las dos bibliotecas se organizan a lo largo del año actividades de animación a la lectura para niños y adultos. Ambas bibliotecas ofrecen a los usuarios adultos talleres de lectura en el que participan una media mensual de 50 personas. Asimismo, en Piedras Blancas se puso en marcha el programa «Palabras mayores» que consiste en visitas programadas de los socios de las asociaciones de jubilados del concejo. La biblioteca de la capital del concejo organiza anualmente «Cita a ciegas», una cita anual que se convoca a través de interne y que en la última convocatoria contó con más de 20 participantes.
Las actividades de animación a la lectura para niños, son las que han contado el año pasado con mayor número de participantes. En la biblioteca de Piedras Blancas se organiza quincenalmente el taller jueves de juegos que está dirigido a niños de 6 a 12 años. En la biblioteca de Salinas se organizaron en 2011 un total de 8 cuentacuentos que fueron seguidos por 235 niños. Asimismo, se organizó una sesión de cine infantil, según explicó la bibliotecaria Rosa Rubio, que destacó la participación de los padres en las actividades.
