Piedras Blancas,
Inés MONTES
El gobierno municipal acometerá en los próximos días la segunda fase de las actuaciones destinadas al ahorro energético y que comenzaron el pasado mes de noviembre. En los próximos días se van a instalar relojes en los cuadros del alumbrado público de algunas zonas que permitirán rebajar la intensidad de la luz entre las once de la noche y las seis de la mañana. «El año pasado la factura del gasto energético fue de 800.000 euros y este año; incluso con los sistemas de ahorro vamos a pasar del millón de euros. El Ayuntamiento no se puede permitir ese gasto en energía deberíamos poner un tope de 600.000 euros», afirmó el portavoz municipal de IU, José Luis Garrido.
Además de las medidas de ahorro energético que han supuesto la desconexión de farolas y ahora la instalación de relojes, el Ayuntamiento ha contratado un estudio con una empresa especializada. «El anterior Gobierno regional nos dio una subvención de 20.000 euros para financiar la redacción de un estudio sobre ahorro energético. La empresa debería haber presentado el informe a finales de diciembre pero pidió una prórroga y lo tendremos en marzo. A partir de ahí veremos que otras iniciativas tomamos para ahorrar energía», indicó.
Las medidas de ahorro energético que se pusieron en marcha en noviembre afectan al alumbrado de Piedras Blancas, Salinas, San Juan, Raíces, Coto Carcedo, Arnao y Santiago del Monte. En algunas calles de esas localidades se apagan algunas fases del alumbrado entre las once de la noche y las seis de la mañana y en otras no arranca.
El las calles de las zonas urbanas en las que las farolas tienen dos pantallas se desconectó una y se dejaron las más altas como en las calles Ramiro I de Piedras Blancas o Marola de Salinas. Asimismo, en el paseo marítimo de Salinas se apagaron las farolas del interior.
El sistema regulador de la intensidad de la luz que se va a instalar ahora en unos seis cuadros de luz se alimenta a 175 vatios y permite un ahorro energético, en comparación con la instalación normal, de más del 42 por ciento, ya que se reduce al 50 por ciento la intensidad de la luz. Asimismo, también se ahorra en los gastos de reposición y mantenimiento de la red pública. El equipo que se instala en los cuadros del alumbrado público permite bajar la intensidad de la luz entre las 12 de la noche y las 6 de la mañana, un tramo horario en el que desciende considerablemente el tráfico de vehículos y el tránsito de personas por las calles.
La iniciativa ya se comenzó a aplicar en 2009 en Piedras Blancas en las calles El Acebo, Gijón, Nuberu, avenida de Galicia y avenida Principal. La inversión fue entonces de 55.000 euros. A finales de 2009 comenzó la remodelación del alumbrado público en Coto Carcedo, que finalizó en 2010 con una inversión de 129.000 euros. Los cuadros reguladores se instalaron también en la calle Alfonso III de Piedras Blancas así como en las carreteras de acceso a los colegios de Campiello y El Vallín y en la Vegona, en la glorieta de acceso a la variante de Avilés. En estas zonas se gastaron 95.000 euros. Ahora la instalación de los relojes costará 600 euros.
