S. FERNÁNDEZ / Agencias

Los dueños del grupo Xstrata impideron el martes pasado que 70 directivos del gigante minero anglosuizo se embolsasen 179 millones de euros en concepto de pluses por el trabajo desarrollado durante la negociación de la fusión más importante del año en Europa: la de Glencore y la propia Xstrata. Este rechazo de los accionistas se ha cobrado ya una primera víctima: Sir John Bond, presidente del grupo minero que es propietario de la empresa Asturiana de Zinc, la tercera fundidora de cinc más importante del mundo. La caída de Bond supone el fortalecimiento de Ivan Glasenberg, el actual consejero delegado del grupo Glencore, cuya voz se escuchará con más fuerza en la nueva empresa, cuyo nombre provisional es New Glencore.

Los accionistas de Xstrata votaron para aprobar la venta de participaciones industriales más importante de este año en Europa. Xstrata tiene activos mineros de carbón, cobre, níquel y cinc, mientras que Glencore tiene un imperio comercial de artículos básicos que van del algodón al petróleo crudo. La fusión de los dos gigantes industriales está pendiente de que los reguladores «antitrust» de Europa, China y Sudáfrica se pronuncien. Todo indica, sin embargo, que Bruselas dará de paso la operación en tanto en cuanto Glencore manifestó hace unos días su intención de deshacerse de un contrato comercial celebrado con el grupo metalúrgico belga Nyrstar. La UE considera que, de no ser así, New Glencore podría ejercer como explotadores de un monopolio en la fundición del cinc. En medios internacionales se barajaron dos posibilidades más: la venta de la fundidora de Asturiana de Zinc en Alemania o de la puesta en el mercado de la planta de San Juan de Nieva. Esta, sin embargo, está muy lejos de materializarse dadas las características de la compañía que, por el momento, preside Santiago Zaldumbide. «Mientras los inversores se han centrado más en el proceso de autorización de la Comisión de la UE, la autorización regulatoria de China también sigue siendo relativamente incierta y es un riesgo», dijeron Jeff Largey, Alon Olsha y Daniel Lurch, analistas de Macquarie Group Ltd., en un informe hecho público el martes.

Según fuentes consultadas, el nuevo grupo industrial ya tiene en su agenda la posible adquisición del grupo empresarial Anglo American. Mick Davis, el actual director ejecutivo de Xstrata, enfoca su futuro profesional hacia la corporación minera Anglo American, cuya dirección ha quedado vacante tras la renuncia a ella de Cynthia Carroll, que la presidió este último lustro. Se da la circunstancia de que Anglo American estuvo en el punto de mira de Xstrata en 2009. Finalmente, el intento de fusión de estas dos compañías no prosperó.

Los trabajadores de Asturiana de Zinc aguardan a que la compañía informe de las consecuencias de la fusión en la fábrica de Castrillón. La fundidora es la joya de la corona de Xstrata y ahora lo será de New Glencore.