La Policía Local de Avilés recibió ayer a mediodía el aviso de que se estaba produciendo un nuevo vertido a la ría de Avilés, en las inmediaciones del puente de Los Canapés, por donde pasa la variante. Los agentes detectaron en esta zona una tubería de la que salía agua «mezclada con líquido oscuro, casi negro». Por el momento se desconocen las causas de este nuevo derrame al estuario, que se suma a una larga lista de incidentes de las mismas características. Responsables de Arcelor-Mittal, factoría próxima a donde se produjo la suelta de agua sucia, descartaron tener relación con este episodio contaminante. «Cada poco tiempo nos anuncian que desaparecerá esta lacra pero por más tiempo que pasa se sigue produciendo, con demasiada frecuencia para sonrojo de las autoridades que lo permiten», critican con periódicamente responsables del Colectivo Ecologista. El último suceso contaminante se produjo a mediados de agosto.
A la suciedad del agua se sumaron «galletas» de lodo de diferente tamaño. Estas piezas de barro es frecuente que afeen la ría avilesina en esta época del año. Se producen siempre que hay importantes diferencias de temperatura entre el día y la noche.
