Somormujo, cormorán o garceta son algunas de las aves acuáticas fáciles de avistar en la ría de Avilés, el monumento natural de la charla de Zeluán y la ensenada de Llodero. Ayer, con motivo de celebrarse en más de setenta países el "Día mundial de las aves migratorias", un grupo de aficionados a la ornitología y de la mano de la asociación Mavea pudo observar el comportamiento de éstas y otras especies, así como conocer sus características. Para ello, el grupo ornitológico asturiano que desde hace años viene realizando un seguimiento de cuantas aves acuáticas pasan por la ría, puso a disposición de los jóvenes y adultos interesados todo tipo de material, prismáticos y potentes telescopios que permitiron acercar la mirada a las diferentes colonias de pájaros. La claridad y luminosidad del día facilitó la observación e hizo que el conjunto de visitantes hasta la zona desplazados disfrutara de una placentera mañana ornitológica.

Además de instalar varios puntos de observación, Mavea, cuyos pilares de actuación son la divulgación, conservación e investigación de las aves, organizó en Zeluán talleres para los más pequeños. En ellos, los niños colorearon, realizaron dibujos y observaron imágenes de las diferentes especies que pueblan la zona para familiarizarse con ellas y así valorarlas y aprender a respetarlas.

Asimismo, los miembros de Mavea guiaron visitas al espacio natural para concienciar y sensibilizar a cuantas personas participaron en las mismas a cuidar y respetar el entorno que cobija a, además de las citadas especies, otras como el zampullín chico y el zampullín cuellinegro.

El "Día mundial de las aves migratorias" tiene por lema "Destino rutas aéreas: aves migratorias y turismo" y se centra en el papel que el turismo sostenible puede jugar en la conservación de una de las maravillas de la naturaleza: los espectaculares desplazamientos de las aves migratorias por vías aéreas. Se estima que en el mundo existen alrededor de cincuenta mil millones de aves migratorias.