El posible cierre de Alcoa, que en medios del sector aluminero dan prácticamente por seguro, generará una sangría de empleo (da trabajo directo, indirecto e inducido a más de 600 familias) y tendrá daños colaterales en las arcas de la Autoridad Portuaria y de los municipios de Avilés y Gozón, donde está asentada la fábrica. La compañía aporta a la comarca más de 1,6 millones de euros al año en concepto de impuestos y de los movimientos portuarios. Es más, un tercio de los tres millones de euros que recauda el Ayuntamiento avilesino al año por el IAE (Impuesto de Actividades Económicas) procede de la aluminera de San Balandrán, según las fuentes consultadas.
Alcoa paga de media al año al Ayuntamiento avilesino un millón de euros del IAE, 24.000 euros de contribución (Impuesto de Bienes Inmuebles) y 400 de viñeta por vehículos de la empresa, según la misma versión. La aluminera también paga parte de su IAE en Gozón. Allí reciben unos 350.000 euros al año por este concepto.
Alcoa pidió a sendos ayuntamientos que le perdonasen el IAE de 2010 en proporción a los días que la planta de San Balandrán permaneció inactiva tras las inundaciones de ese año, que dejaron inútil la subestación eléctrica. Y aceptaron. Gozón condonó unos 100.000 euros por este motivo a la multinacional y Avilés hizo lo propio por una suma próxima a los 200.000 euros, confirmaron fuentes municipales.
¿Y qué supone para el Puerto la posible marcha de Alcoa, que dispone de muelle propio? El pasado año, por ejemplo, la multinacional pagó a la Autoridad Portuaria 449.518 euros por tasas y tarifas y 106.027 euros por servicios portuarios (amarre y practicaje, fundamentalmente, puesto que apenas tiene gastos de estiba al realizar la descarga directamente por tuberías). En lo que va de año la factura de Alcoa por tasas y servicios portuarios asciende a 464.747 euros. En 2011 dicha factura llegó a los 730.000 euros, la más elevada de los últimos años: 350.867 por el uso de los muelles, 238.617 por tasas de concesión y 140.717 euros por el amarraje y practicaje.
La evolución de los tráficos portuarios de Alcoa (principalmente movimientos de alúmina y coque de petróleo) desde 2007 se traduce en una línea descendente, que tuvo como único pico 2011 (el ejercicio posterior a la parada de la fábrica tras las inundaciones). La aluminera ha pasado de mover por los muelles locales 208.637 toneladas en 2007 a sólo 121.149 en 2014, a falta de un mes para terminar el año; es decir, sus tráficos portuarios han descendido un 42% en siete años.
La Unión de Comerciantes de Avilés y Comarca (UCAYC), por otra parte, manifestó ayer a través de un comunicado su solidaridad con los empleados de Alcoa, que pueden quedarse sin puesto de trabajo a partir del próximo 1 de enero, y con sus familias. "Cientos de comerciantes y hosteleros han sufrido en los últimos años las nefastas consecuencias del cierre de sus pequeños negocios. Y lo han hecho en medio de un doloroso silencio, sin contar con ningún tipo de protección social ni resonancia. Por eso sabemos que es precisamente en estos duros momentos cuando tenemos que ofrecer, con más fuerza que nunca, nuestro ánimo y apoyo", recoge el comunicado remitido por el colectivo de comerciantes y hosteleros.
