El barrio de Sabugo vistió ayer sus mejores galas para recibir a la ministra Ana Pastor. La plaza del Carbayo fue testigo de la pomposidad del acto de bienvenida que la ciudad quiso brindar a la dirigente popular y que contó con numerosos asistentes. A falta de 15 minutos para el mediodía, hora prevista de llegada de Pastor, ya estaba todo dispuesto. La banda de música formaba a la espera de que su nuevo director, Daniel Santos, levantase la batuta para empezar a tocar. También formaban, con trajes de gala, Mariano Revuelta, capitán de la Guardia Civil, Alberto Núñez, jefe en funciones de la Policía Nacional de Avilés, Vicente Bravo, delegado del Ministerio de Defensa en el Principado de Asturias y Juan Carlos Álvarez, segundo comandante de Marina.

Con el repicar de las campanas a las 12.00 horas en punto, y ante la demora de la propietaria de la cartera de Fomento, el nerviosismo aumentaba. Cada vez llegaban más curiosos a la plaza del Carbayo que se preguntaban extrañados el porqué de ese gentío. "¿Quién viene?", "¿Serán los Reyes?", se comentaba en los corrillos. Mientras tanto seguían llegando autoridades políticas. El Partido Popular quiso mostrar su fuerza, y hasta Avilés se desplazaron algunos de sus primeros espadas: Ovidio Sánchez, diputado por Asturias, Fernando Goñi, diputado en la Junta General del Principado de Asturias o Mercedes Fernández, presidenta del PP en Asturias no quisieron perder la oportunidad de salir en la foto junto a Pastor.

Las 12.15 horas. Más de un centenar de avilesinos se arremolinaban en torno a la iglesia de Santo Tomás de Canterbury. No paraba de entrar gente en la plaza, y la ministra no llegaba. Mientras tanto, Mariví Monteserín, alcaldesa de Avilés, Yasmina Triguero, alcaldesa de Castrillón, y Alberto Tirador, alcalde de Illas, alcanzaban la plaza del barrio marinero. A las 12.17 horas, la banda de música arrancaba a tocar y por la calle La Estación entraba un coche oscuro de alta gama. La gente miraba hacia el vehículo y los flashes de los fotógrafos empezaban a lanzar destellos. Del automóvil se bajaron Gabino de Lorenzo, delegado del Gobierno en Asturias y la esperada Ana Pastor. Ambos subieron el tramo de la vía que les llevó hasta la plaza del Carbayo, coronado por un arco de laurel y banderas rojigualdas instalado especialmente para la ocasión. Todas las autoridades se ordenaron en fila para el protocolario saludo, al que luego se unieron varios espontáneos que no quisieron perder la oportunidad de saludar a la ministra.

Liquidado el trámite, la comitiva presidida por Pastor bajó la calle La Estación hacia la terminal de trenes avilesina, donde la dirigente popular, junto a Monteserín, descubrió una placa conmemorativa del 125.º aniversario de la llegada del ferrocarril a Avilés; todo ello entre más fotos, besos y saludos. Sin más dilación ni tiempo que perder, el séquito si dirigió a la cantina anexa para visitar la exposición de objetos ferroviarios. Allí la exministra de sanidad acuñó varias cartas con el matasellos rememorativo de la efeméride y, tras un breve receso para tomar un refrigerio, la celebración culminó en el Club Náutico de Salinas, donde el mismo restaurante que hace 125 años sirvió el almuerzo, el Lardhy, de Madrid, ofreció un banquete a base de cocido madrileño.