Los trabajadores de Los Telares comienzan a ver la luz al final de un túnel de meses agónicos que han terminado con el el cierre de la compañía fundada hace 40 años por Julián Rus. Entre ayer y hoy mismo recibirán la documentación necesaria para tramitar sus subsidios de desempleo en el Servicio Público de Empleo, una reclamación que los operarios llevaban demandando mucho tiempo. Con esta medida se cumple el compromiso sellado hace unos días por el administrador concursal, Leopoldo Pons, y la mesa negociadora del ERE, un acuerdo que pone punto y final a una situación recrudecida especialmente desde abril, cuando la gestión del fondo Gryphus Partners empezó a ser más que contestada.

El comité de empresa quiso felicitar públicamente a los siete empleados de oficina que han tramitado en menos de una semana los despidos de los 456 empleados. Además también ha querido dar las gracias a Pons por el compromiso que ha tenido con los trabajadores para que éstos puedan cobrar la ayuda de desempleo en el mes de agosto, dado que llevan desde abril sin percibir ingresos.

Los administradores de la compañía admitieron recientemente a los sindicatos que el nivel de facturación de la empresa disminuyó de manera drástica en los últimos años, agudizándose esta situación desde hace seis meses, hasta llegar a una reducción de un 51,01 por ciento con respecto al ejercicio 2011-2012. Según los datos ofrecidos por los liquidadores de Los Telares, en el ejercicio 2011-2012 la empresa facturó 53.970.834 euros, mientras que este año la cuenta de resultados se cerrará con 26.439.210 euros, lo que ha derivado en una indisponibilidad absoluta de liquidez para hacer frente a los créditos en el presente. La firma textil adeuda a sus 456 trabajadores los salarios correspondientes al 87,5 por ciento de la nómina de abril, la totalidad de las nóminas mayo y junio y varias pagas extra de este y el pasado año 2014.