La Policía Nacional detuvo el pasado martes 28 de junio a cuatro individuos por tráfico de estupefacientes en un piso del avilesino barrio de Llaranes. La venta de droga era llevada a cabo por un matrimonio que residía en un piso del barrio avilesino, pero ante el auge del negocio a la vivienda también acudían dos operarios de albañilería para realizar la venta en la ausencia de la pareja, a la vez que realizaban obras de reforma en el piso, según fuentes de la Policía Nacional. Además, el matrimonio convivía con sus tres hijos de muy corta edad en la vivienda, por lo que la situación se puso en manos de los Servicios Sociales del Principado para que realicen las acciones pertinentes.

En la operación, que ya adelantó LA NUEVA ESPAÑA la semana pasada, las autoridades se incautaron de 310 dosis de heroína, 170 dosis de cocaína base, una báscula de precisión, 950 euros en metálico, útiles para la preparación de la cocaína base y efectos para su distribución. En el momento de la detención los agentes también sorprendieron a tres "clientes" consumiendo cocaína base en la cocina del domicilio, una práctica que los agentes intuyen como habitual en los camellos, realizada con el fin de que sus compradores no fuesen sorprendidos por la Policía Nacional portando la droga por la calle.

Las fuerzas de seguridad comenzaron a investigar el punto de venta a mediados del mes de junio, cuando tras varias redadas en la ciudad detectaron una red de distribución en Llaranes debido a la "calidad" del producto y al aumento de toxicómanos en la zona. Tras las pesquisas pertinentes fue el Juzgado de Instrucción que dirige la investigación quien autorizó la entrada y registro de la vivienda

Éste es el sexto punto de distribución de heroína y cocaína desarticulada por la Comisaría de Avilés en los últimos dos meses. El pasado junio la Policía Nacional también realizó una redada antidroga en el barrio de La Maruca que se saldó con la detención de tres jóvenes de un conocido clan familiar de traficantes de heroína y cocaína. Los detenidos fueron un varón de 25 años y dos mujeres de 22 y 29 años, que pertenecen a la familia de la conocida como la "narcoabuela". A principios de este mes también se detuvo a una cuarta integrante de este supuesto clan de narcotraficantes por la venta de estupefacientes.