Ascensión Amores, Susi, no pidió ayuda. Ahora, las banderas del Ayuntamiento de Avilés ondean a media asta en señal de duelo por su muerte. "No sabemos si era consciente de que corría peligro o no, no lo vamos a saber", dijo ayer la alcaldesa de la ciudad, Mariví Monteserín, que decretó la jornada de hoy de luto oficial y convocó una concentración silenciosa para este mediodía (12.00 horas) en la Plaza de España. La Regidora mostró su enérgico rechazo a la violencia machista. La avilesina Ascensión Amores es la octava víctima desde que comenzó 2016 en España, la primera asturiana. Tenía 46 años y su marido, el presunto autor del crimen, 45.
"Quiero manifestar en primer lugar las condolencias y nuestro dolor a los familiares y amigos de Ascensión", destacó Monteserín. Reiteró a su vez la importancia de solicitar ayuda, tanto víctimas como verdugos. "La ayuda puede pedirse a instituciones, amigos, familiares, a organizaciones sociales, centros asesores, a la policía, al médico... Pero se tiene que pedir, porque no se puede proteger lo que se desconoce", subrayó. A los hombres también les lanzó un mensaje: "Un día como hoy hay que decir a los hombres que están viviendo un proceso en el que están ofuscados y absorbidos por una realidad y que pueden recibir ayuda de especialistas, que la ley habilita espacios para los hombres que se encuentran en estas situaciones antes de llegar a una situación fatídica como este asesinato".
La Alcaldesa de Avilés acordó con los portavoces municipales, el Gobierno regional y la Delegación de Gobierno en Asturias declarar la jornada de hoy de luto oficial en Avilés y suspender la actividad institucional. Hizo un llamamiento a su vez para participar a mediodía en la concentración que se desarrollará en El Parche. "Debemos acudir para expresar nuestro dolor, nuestra firme decisión de luchar contra la violencia de género y manifestar nuestra compañía a la familia y amigos de Ascensión", concluyó. Susi es la cuarta víctima avilesina por violencia machista en este siglo. Le precedieron en la trágica lista Luisa María, asesinada en Cataluña en 2001; Anabel Gutiérrez, en 2007, y Amaranta Cuevas, en 2011.
Desde el Ayuntamiento, el Gobierno regional y la Delegación de Gobierno, así como desde el Consejo Asturiano de la Mujer, ofrecieron ayer por la tarde a la familia de Ascensión servicios de asesoramiento jurídico y apoyo. Las tres administraciones reivindicaron además la necesidad de un pacto colectivo "para acabar con esta pandemia social". La muerte de Susi Amores eleva a ocho el número de mujeres víctimas mortales por violencia machista desde que comenzó el año, tantas como en el primer trimestre de 2015.
La Unión de Comerciantes de Avilés y Comarca (Ucayc), entidad de la que el supuesto asesino, Julio Pardo, era vocal de confitería, emitió ayer un comunicado: "En relación con el doloroso y terrible asesinato acaecido hoy (por ayer) en nuestra ciudad, y presuntamente cometido por un miembro del Comité Ejecutivo de la Ucayc, queremos manifestar nuestra solidaridad con la víctima y su familia, así como nuestro más enérgico rechazo frente a cualquier tipo de violencia sexista en todas y cada una de sus expresiones". Manuel Campa, en calidad de presidente de la Mancomunidad Turística, entidad con la que colaboraba habitualmente el presunto asesino, se sumó a las palabras de la Alcaldesa de Avilés y animó a participar en la concentración de este mediodía.
El Partido Popular de Avilés también se sumó ayer a las muestras de dolor por la muerte de Ascensión Amores. "Es intolerable que en el siglo XXI aún sigamos sufriendo esta lacra", dijeron a través de un comunicado. Pidieron también la implicación de todos los partidos, asociaciones y vecinos para denunciar cualquier manifestación de malos tratos y denunciar también a los agresores.
Los representantes de la unión comarcal de Comisiones Obreras (CC OO) condenaron por su parte el presunto asesinato de Ascensión Amores. "Exigimos que este terrorismo machista sea considerado una cuestión de estado, por lo cual reclamamos a los partidos políticos que lo aborden a la mayor urgencia posible. Debemos hacer una llamada a la sociedad para que no mire para otro lado, el silencio nos hace cómplices y las mujeres tenemos derecho a una vida libre de violencia", señaló la secretaria de la Mujer del sindicato, Mercedes Alcaraz.
El presidente de la asociación de vecinos del Carbayedo, Manuel Fernández, quiso expresar también su dolor por la pérdida de su vecina de una forma cruel. "Es un mazazo para el barrio. Nadie puede pensar una cosa así puede ocurrir a la puerta de casa", dijo. Ascensión Amores murió en su casa, en el número 11 de la calle Ramón y Cajal.
